Traición, estrategia en la sucesión a la gobernación

Comunicado

Nada resume mejor en toda su dimensión el fango en el que se disputa a muerte la sucesión a la gobernación por Oaxaca que las palabras del ex gobernador Ulises Ruiz en el último video filtrado a las redes sociales.

El lenguaje majadero que caracteriza la conversación telefónica con Jesús Romero López, principal operador de Benjamín Robles Montoya, revela ante todo la magnitud de la traición.

La prostitución del grupo político de Benjamín, se pone de manifiesto en toda su crudeza al llamar con todas sus letras reiteradamente Ulises a “Charvelín”, “hijo de puta” y “puto”.

DETRAS-JESUS ROMERO Y BENJAMIN ROBLESNo nos sorprende. Con el politólogo español Josep Ma. Reniu Vilamala aprendimos en la maestría Derecho y Política Electoral que “la política es la eterna historia de las traiciones”.

Tampoco pecamos de ingenuos. Nos llama la atención la conversión de la traición en principal estrategia de lucha a muerte en la obsesión patológica de imponer candidato a la gobernación.

El propósito fundamental de la llamada de “Charvelín”, Jesús Romero López, al ex gobernador Ulises Ruiz, fue negociar “lo que viene” con la condición de que se le trate como “rey”.

Además del trato indigno a los perredistas en la conversación, se revelan las corruptelas durante su mandato, a los que URO sigue corrompiendo en busca de la candidatura del PRI y del PRD.

URO: Pinche Charvelín aparte de tu pinche pedo polaco, me cae que yo te veo así como un hermano-hijo güey.

JRL: Yo lo sé, siempre me ayudaste con todo y todo.

URO: Vale verga eso, no estoy hablando de gobernador ni de apoyos, te veo así como chavito güey.

JRL: ¿Sí? Hijo de la chingada, pues apuéstale un poquito conmigo carnal.

URO: Pues ya güey, dime para dónde vamos.

JRL: Uy, luego te cuento personalmente.

De entrada, qué pronto olvidaron los perredistas el espionaje y la brutal represión de Benjamín Robles Montoya en su contra, en Michoacán, en el gobierno de Víctor Manuel Tinoco Rubí.

Desde el Centro de Investigación para el Desarrollo de Michoacán (CIDEM), espió al propio gobernador, a políticos de los diversos partidos, funcionarios, empresarios y periodistas.

Fue integrante del grupo que hacía la “propaganda negra” a Alfredo Anaya Gudiño, candidato del PRI al gobierno de Michoacán que perdió ante el perredista Lázaro Cárdenas Batel.

A pesar de ello, el PRD le incorporó a sus filas e hizo senador y hoy insiste en ser candidato a gobernador, a pesar de la rotunda oposición de Gabino Cué y apoyo de éste a Pepetoño Estefan.

Qué pronto olvidó, también, el ex gobernador Ulises Ruiz Ortiz, las severas críticas contra él y los integrantes de su gobierno durante las denuncias de Benjamín por la escandalosa corrupción.

Como diputado local de Convergencia, el hoy senador del PRD creó en 2009 el Observatorio Ciudadano contra la Corrupción, “principal cáncer que es necesario extirpar en Oaxaca”.

Al denunciar el desvío de URO por más de 1500 millones de pesos para construir el Hospital SEDNA en el DF, Benjamín dijo que éste necesitaría ganar por 1190 años y medio los 105 mil pesos mensuales como gobernador.

A Ulises Ruiz y Benjamín Robles les une el resentimiento contra el PRI y el PRD, respectivamente, porque ni Eviel Pérez Magaña ni el propio Benjamín serán candidatos a gobernador.

Así que nada de extraño será que Ulises Ruiz y Benjamín Robles jueguen las contras a sus respectivos partidos, PRI y PRD, para hacer perder a Alejandro Murat y a Pepetoño Estefan, consumando una traición más.

 

alfredo_daguilar@hotmail

director@revista-mujeres.com

@efektoaguila

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Compruebe también
Close
Back to top button