¡Toledo a muerto!

Paloma Duarte: 

Fotos de Javier Santiago

Oaxaca, Oax.- a 6 Septiembre 2019 .- La figura de aquel señor de barba abundante de cabello alborotado, con calzón de manta, camisa arrugada y huaraches de cuero, no se verá más en el Centro Histórico de Oaxaca.
¡Toledo a muerto!
Víctima de cáncer de próstata a los 79 años murió el artista juchiteco que por amor a Oaxaca vivió en la capital del estado sus últimos años, pero no se conformó con eso, pues desde su trinchera Francisco Benjamín López Toledo fue impulsor de la cultura y defensor de la protesta social.
A su estilo, la defensa del Cerro del Fortín, las lenguas autóctonas, el maíz criollo y los 43 de Ayotzinapa se convirtieron en su bandera; el 21 de diciembre de 2014 organizó el vuelo de cometas con el rostro de los estudiantes normalistas desaparecidos en Ayotzinapa; ese día en el cielo oaxaqueño se elevaron los rostros de los jóvenes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos.
Caracterizado por la rebeldía, en julio de 2015 logró que las autoridades de Oaxaca se replegarán de construir el centro Cultural y de Convenciones en la rotonda de las azucenas y lo edificaran en Santa Lucía del Camino, aunque ello, le costó amenazas de muerte.
Ese mismo año intentó instituir un premio, el de la “sordera de políticos”, con quienes sin duda alguna convivía, pero poco toleraba; y es que, la injusticia, el miedo, la inseguridad y lo que pasaba a los periodistas que no se alineaban era un tema que le preocupaba.
Nunca temió por su vida, pues consiente decía: “como el trompo demuestro que las vueltas frente al sol, se me están acabando”, y efectivamente este lunes a 50 días de su último cumpleaños se terminó su paso en esta tierra.
OAXACA DE LUTO
Lo que inició como un rumor la noche del jueves, poco a poco se convirtió en un reguero de pólvora que termino por incendiarse a las 10:17 de la noche, cuando la familia en un escueto comunicado informaba lo que todos querían fuera una mentira, el maestro había muerto.
“Pedimos respetar nuestro dolor, la manera en que nuestro padre manejó su intimidad. Gracias por sus muestras de cariño y comprensión. A partir de las 23:30 horas de este 5 de septiembre en el IAGO habrá una ofrenda para quien quiera acudir…” sumaron.
A partir de entonces el hermetismo rodeo la muerte de un grande, las puertas de su amado Instituto de Artes Gráficas se abrieron nocturnas, para recibir a quienes, con flores, veladoras y relatos le agradecieron su paso por esta vida.
En medio de la conmoción que la muerte de un grande deja, hasta el clima en Oaxaca se enrareció, el cielo nublado no pudo despedir a su hijo prodigo como lo merecía, tal vez porque en su humildad característica él no lo quiso así.
La carroza que llevó sus restos, arribo a la calle de García Vigil en donde los emblemáticos arquitos de Xochimilco fueron los testigos mudos de lo que al interior de la vivienda paso. Con papel kraft amigos del maestro taparon el ascenso del féretro para trasladarlo al crematorio
Su legado conformado por el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, el Centro Fotográfico Manuel Álvarez Bravo, el Centro de Artes de San Agustín y la Asociación Amigos del IAGO se vistieron de luto. La bandera de México lució a media asta.

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