Aspira a gobernar primera mujer en San Miguel Chimalapa
El imparcial
En el pueblo zoque ninguna fémina ha sido candidata a presidenta municipal y tampoco ha obtenido algún cargo dentro del cabildo.
San Miguel Chimalapa, Oax.- El 23 de octubre, el municipio de San Miguel Chimalapa elegirá a su gobernante por medio del sistema normativo interno “usos y costumbres”, esta la primera vez que una mujer compite, Ceyla Cruz Gutiérrez es la candidata del pueblo, su mayor reto es ganar y gobernar en igualdad, comprometida totalmente con la defensa de su territorio ancestral y de sus invaluables bienes naturales ahí existentes.
Son cinco candidatos los que aspiran a ocupar el puesto de alcalde dentro de un territorio que ha vivido una constante lucha por la defensa de sus límites territoriales y que continúa inmerso en la pobreza y el abandono, a pesar de ser una población rica en bienes naturales.
Ceyla es abogada y madre de dos niñas, a sus escasos 15 años abandonó su tierra para ir a estudiar y prepararse a la ciudad de Oaxaca, regresó a San Miguel Chimalapa y hace dos años formó un comité comunitario con el respaldo de la base comunal de las agencias municipales de la zona centro, cuyo objetivo central ha sido la defensa del territorio comunal frente a las invasiones provenientes de Chiapas y evitar el despojo y saqueo de parte de madereros, ganaderos y empresas mineras.
Hace apenas tres años también participó como candidata para ocupar el cargo de presidente del Comisariado de Bienes Comunales pero lo perdió, la excusa fue por ser mujer, siendo en realidad víctima de un impune fraude electoral, avalado por la Procuraduría Agraria y el Registro Agrario Nacional, instituciones agrarias federales que elaboraron y validaron un acta de asamblea en la que aparecen votando cerca de una veintena de comuneros fallecidos así como personas que no son comuneros de la población.
La mujer zoque a diferencia de las ikoots participan en las asambleas comunitarias, su voz y voto valen mucho, sin embargo cuando participa para ser autoridad se torna complicado y el machismo se impone, más aún si se involucra en esta participación, el deseo de defender honestamente a los intereses de la comunidad.
El principal impulso de Ceyla para gobernar su tierra es la decepción por sus gobernantes, quienes no han sabido gestionar para el pueblo y únicamente se han beneficiado sus bolsillos.
“San Miguel es un municipio muy importante; tenemos una gran biodiversidad y antecedentes de lucha, pero hace falta algo, que una mujer gobierne el municipio, en primera hemos logrado un cambio, el método de elección, antes era masivo, sólo en la cabecera y en asamblea a mano alzada, con presencia de acarreados y gente avecindada, siendo fácil la intimidación y la compra de votos. Pero tras una presión encabezada por la propia Ceyla, hace tres años se realizó una consulta comunitaria ciudadana en donde se eligió el método a utilizar y éste será por urnas y casillas, es decir voto secreto y además, realizado en todas y cada una de las Congregaciones comunales y agencias municipales de San Miguel”, expresó.
El consejo municipal electoral en San Miguel Chimalapa se instaló el 28 de septiembre y el pasado viernes 7 de octubre e inició la primera sesión del consejo rumbo a la elección del 23 de octubre.
La lucha que ha comenzado Ceyla no es de ahora, sino de hace tres años, ha caminado las 18 agencias municipales, ha recorrido cada rincón platicando en asambleas y con familias, con los hombres y mujeres.
Ceyla cumple con los roles de una mujer, cuida a sus hijas y convive con su familia, sabe que las miradas de su gente están puestas sobre ella, mientras avanza y dialoga busca la integración y hacer del 23 de octubre una fecha histórica.
“Si ganó la elección municipal será histórico, porque es la primera vez que participa una mujer como candidata y también sería la primera mujer en gobernar mi terruño, sé que es un reto y le pido a mi gente la oportunidad, una mujer sabrá llevar las riendas de San Miguel Chimalapa, un pueblo que vive con una herida de zozobra, invasiones, saqueos y abandono.
El caminar de Ceyla no ha sido fácil, reconoce que la política en su comunidad sólo es por intereses personales a los que ella difiere porque ha demostrado que su única preocupación es la defensa de su territorio, de la naturaleza, el bienestar social y la autogestión.
En San Miguel Chimalapa, se vive con una herida abierta de justicia, su gente, sus hombres y mujeres luchan contra los invasores y acaparadores de la tierra y el territorio, así como contra los depredadores de bosques y selvas. Ceyla sabe que es un reto gobernar su tierra.
La promoción de asambleas comunitarias es una de sus prioridades, valorar lo que opine el anciano y la anciana, el comunero y la comunera.
El municipio vive desamparado, en materia de salud los médicos llegan pero no hay medicamentos, las mujeres son víctimas del cáncer, no existe una casa de cultura por lo que Ceyla propone revitalizar con acciones su lengua materna, el zoque, así como sus trajes, su historia oral y danzas.
También en materia de desempleo para colaborar a que disminuya, Ceyla ha dicho que promoverá proyectos productivos sustentables para el sector agrícola, ganadero y silvícola.
“Es necesario impulsar la participación ciudadana, que nuestra gente participe, que nuestra gente escuche, reflexione y opine, que los zoques tengan avances en materia de valores, necesitamos un despertar pero con responsabilidad hacia el bien común de nuestra gran comunidad”, expresó.
Ceyla está preparada, sabe que no será fácil conseguir la alcaldía, pese a las presiones que ya está sintiendo, ella está dispuesta a asumir el reto y buscar la transparencia, rendición de cuentas y mejorar la vida social de su gente, los chimas.
“La fecha es el 23 de octubre, San Miguel necesita un nuevo rostro, nosotras priorizamos la vida, la naturaleza y el territorio, no más, añoramos crecer y que la tierra sea de quien la defiende, la cuida y la trabaja”, recalcó Ceyla.
