Responsabilidad de todas y todos, actuar contra la violencia en el noviazgo: IMO

• El modelo de amor ideal es donde no existe el concepto de propiedad privada y es ajeno a la violencia.

Las agresiones en el noviazgo constituyen un serio problema social, de salud pública, de desigualdad de género y de acceso a la justicia, señala la directora general del Instituto de la Mujer Oaxaqueña (IMO), Anabel López Sánchez a propósito del Día del amor, cuyo significado afirma, se ha desvirtuado ante estereotipos fomentados por la publicidad, la cultura patriarcal, las instituciones sociales y los medios de comunicación.

Hoy en día el modelo del amor romántico ha evolucionado pero cada vez es más consumista, más cerrado en sí mismo, más idealizado: acumular bienes, aparentar, vivir en sociedad. En contraparte, el modelo de amor ideal asegura López Sánchez es aquel que no está basado en la necesidad ni el miedo a la soledad. Un amor exento de ansias de exclusividad, un amor libre donde no existe el concepto de propiedad privada y por ende, ajeno a la violencia.

La violencia en una relación de pareja se refiere a toda acción u omisión que daña tanto física, emocional como sexualmente, para dominar y mantener el control sobre la otra persona. De ahí que la violencia va desde el ataque a la autoestima, los insultos, el chantaje, la manipulación sutil, los golpes y la agresión sexual.

Entre las principales causas de la violencia en el noviazgo estan el medio cultural en el que se desarrollan las personas, la violencia en los hogares y, sobre todo, la “naturalización” de actitudes tales como pellizcos, mordidas, jalones, empujones, gritos, entre otras.

La violencia debe ser entendida como una conducta que se aprende, enfatiza la titular del IMO, y no algo de carácter hereditario. Ésta se reproduce en forma de “cascada”, se parte desde un nivel general (la cultura, las creencias, la ideología, el género) hasta llegar a un nivel particular (la familia, las relaciones interpersonales).

Las personas no nacen violentas, la cultura las hace; el ambiente en el que viven, la educación, la religión y todo el medio que les rodea pueden provocar violencia. Por ejemplo, la educación con las reglas de género, la forma en que se educa a hombres y mujeres ha hecho de nuestra sociedad un ambiente donde predomina la cultura patriarcal.

En este contexto el IMO hace un llamado a todos los actores sociales, a  quienes integran las instituciones de gobierno en sus distintos niveles, para reflexionar en torno a nuestra responsabilidad individual frente el fenómeno de la violencia naturalizada durante el noviazgo, donde la población jovén e incluso adolescente puede llegar a concebir como la única forma de relacionarse con las demás personas.

Las cifras son claras, recalca López Sánchez, pues según datos de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares  (ENDIREH) 2011, el 34.7% de las mujeres solteras de 15 años y más en Oaxaca declaró haber tenido algún incidente de violencia por parte de su última pareja. Esta proporción es mayor (43.1%) entre las mujeres casadas o en unión libre, de las cuales, 87% sufrió violencia emocional (menosprecios, amenazas, y prohibiciones, entre otros); 49.8% padeció violencia económica (la pareja le reclama cómo gasta el dinero, no le da gasto, se gasta lo necesario para la casa o le prohíbe trabajar o estudiar);  30.2% fue víctima de algún tipo de violencia física (empujones, patadas, golpes con las manos o con objetos, agresiones con armas, entre otros) y 14.3% tuvo algún incidente de violencia sexual por parte de su pareja.

Si bien desde el IMO trabajamos permanentemente en la prevención con talleres, charlas y campañas; también se atienden los casos de violencia contra mujeres; no obstante, a todas y todos nos corresponde actuar en aras de erradicar paulatinamente este flagelo social, pues su existencia mina las posibilidades de desarrollo de las personas y de toda la entidad.

Para mayor información les invitamos a visitarnos en la calle de Eucaliptos #422 en la colonia Reforma de la ciudad de Oaxaca o llamar a la linea gratuita 01 800 831 7656 donde personal especializado brindará la atención adecuada.