Mujer acude a pedir empleo, la envían a revisión médica, le detectan tumor y ya no la CONTRATAN
MILENIO
Para sacar adelante a sus tres hijas se puso a vender comida hasta que la enfermedad ya no tuvo solución pero carecía de recursos para operación; al final recibió apoyo.
Una mujer acudió a pedir empleo y como parte del proceso de contratación la enviaron a que se realizara una revisión médica, en la cual le fue detectado un tumor, por lo que al final ya no pudo obtener el trabajo.
Una asociación civil que ayuda a personas de escasos recursos dio a conocer la historia de Karina. Ella tiene 41 años y es originaria de Tamuín, en el estado de San Luis Potosí, un lugar cercano a Tampico, Tamaulipas.
Relata que en junio de este año, Karina tuvo la necesidad de pedir empleo pues es madre soltera de tres niños y requiere de recursos económicos.
“En junio del 2021, fuí a pedir un empleo a un lugar en donde me hicieron un chequeo médico como parte del proceso, durante la revisión, el doctor notó que mi vientre estaba abultado y me requirió un ultrasonido, el cual arrojó que tenía un tumor en un ovario”.
Debido a su estado de salud, Karina ya no fue contratada, así que empezó a vender comida para mantener a su familia.
“No fui contratada, me quedé sin empleo, enferma y con 3 niños que mantener yo sola. Empecé a hacer tamales, empanadas y tacos para mantener a mi familia”.
Le era difícil trabajar
Los meses pasaron y el tumor seguía creciendo, pero no tenía los recursos suficientes para someterse a una cirugía y nadie la quería contratar.
“Mi vientre me pesaba, cada vez era más difícil trabajar así, en ningún lado me querían contratar. Yo lloraba porque no encontraba la solución para mi enfermedad; tenía mucho miedo de dejar a mis niños sin mamá”.
Hasta que una de sus hijas empezó a investigar y dio con la asociación Unión Provida, la cual apoya a personas de escasos recursos a recibir atención médica. Después de valorarla, le dijeron que la iban a operar y para ella sucedió el milagro.
“Cuando salí de cirugía, el doctor me contó que me quitó un tumor muy grande que abarcaba la matriz y el ovario. Cuando regresé a casa mis hijos corrieron hacía mi y abrazados se pusieron a llorar, me decían que qué bueno que ya había regresado y que estaban felices de que estuviera bien”.
Actualmente, Karina regresó a sus actividades. “Hoy me siento bien, estoy recuperándome poco a poco, ya empecé a vender taquitos nuevamente”.
