Inusitada resolución judicial en contra, aumenta las dudas de tráfico de influencias: gasolinera Brenamiel

*Batalla legal no concluye, se acudirá a instancias superiores
*Precedente de alto riesgo para otras empresas del ramo
*Juez Guerrero Trejo aceptó hipótesis de fuga mágica capaz de atravesar ocho barreras

Oaxaca, Oax.- La decisión judicial de mantener la negativa para el suministro de gasolina, confirma que existe un tráfico de influencias o bien, es necesario que una instancia superior le enmiende la plana al juez Cuarto de Distrito, Pedro Guerrero Trejo que pese a tener enfrente documentos y peritajes técnicos, se aferra a darle válidez a un reporte con opiniones vagas y sin sustento, emitidas por Protección Civil en el año 2015 durante la gestión de Felipe Reyna Romero, hoy funcionario de vialidad del municipio de Oaxaca de Juárez.

Así lo manifestó el representante de la gasolinera de Brenamiel, Gerardo Reyes Martínez, tras conocer la suspensión definitiva del amparo en contra, expresó que lamentablemente el juzgador solamente utilizó los documentos técnicos y permisos federales para sostener el argumento de los quejosos sobre un riesgo -descartado tajantemente por SAPAO en oficio del 8 de junio de este año- de la contaminación a un tubo de agua potable al afirmar que: “…no existe riesgo de contaminación del agua, que circula en la línea de conducción de agua potable…”.

Es decir, el organismo negó dicho riesgo, además que la imaginaria contaminación del agua tendría que atravesar muchas barreras; la primera, los tanques de almacenamiento, con doble grosor de acero especial y con su hermeticidad certificada mediante pruebas computarizadas; luego otra barrera de arena compactada; otra más de cemento aplanado; una más de tabicones de hormigón en piso y paredes; posteriormente de seis a ocho metros de tierra compactada; enseguida tendría que atravesar la pared de tabicones de hormigón del “encamisado” protector que la empresa construyó para proteger el ducto de SAPAO; finalmente la octava barrera, después, esa fuga imaginaria tendría que inundar dicho “encamisado” para mágicamente perforar el ducto de acero y consumar la contaminación que aseguran los quejosos.

En ese punto hipotético, la empresa ya habría registrado pérdidas por cientos de miles de litros y millones pesos, algo a lo que ningún inversionista en su sano juicio se expondría, puntualizó Reyes Martínez.

Esa trágica ilusión, -dijo- es la que aceptó el juez Guerrero Trejo que, penosa y preocupantemente, acaba de sentar un precedente que, sin duda, será sujeto de revisión, pero coloca en riesgo a muchas otras empresas similares que se encuentran en la zona metropolitana, ya que con ese razonamiento, dicho juez tendría que aceptar y dar por buenos los reclamos e hipotésis de cualquier grupo de vecinos inconformes con una gasolinera, sostuvo Reyes Martínez.

Añadió que las dudas sobre el pago de favores o tráfico de influencias, no pueden ser despejadas ante el empecinamiento del juez por dar válidez a un reporte emitido en el año 2015 por encima de estudios y peritajes especializados, emitidos en los años 2016 y 2017, lo cual resulta incomprensible, teniendo en cuenta que dicho juez también desestimó el hecho que el mismo tubo que los quejosos defienden, pasa por centenares de predios, tanto de uso habitacional como industrial.

“El compromiso de nuestra empresa ha sido el del apego a las normas, a la ley pero esto es francamente inaúdito, o por decir lo menos, una incapacidad total del juez”. Cuestionado sobre un posible tráfico de influencias por parte de familiares del ex secretario de Salud preso en el penal de Ixcotel, Germán Tenorio Vasconcelos, como: María de Lourdes Tenorio Vasconcelos, Ana Lucía Ángel Tenorio, Jose Manuel Ángel Tenorio, José Manuel Ángel Villareal, Rafael Candiani Gutiérrez, la directora de Economía y Turismo de Oaxaca de Juárez, Adriana Aguilar Escobar, entre otros quejosos, Reyes Martínez acotó, “son demasiadas casualidades juntas, sin embargo no podría afirmarlo, lo que es seguro es que la batalla jurídica no ha concluido y volveremos a abrir”.

Respecto a solicitar la revisión ante otra instancia, Reyes Martínez destacó que la posibilidad es amplía, “En su juzgado, Guerrero Trejo puede decidir por si solo, pero en instancias superiores los fallos son colegiados, es decir, que se necesita una mayoría de votos y en nuestro caso se ha cumplido con toda la normatividad ambiental y de seguridad industrial aplicable, misma que el juez del caso ha ignorado por completo, por eso tenemos la seguridad de obtener en definitiva, la protección de la justicia”.

Al momento, las instalaciones de la gasolinera ubicada en la carretera internacional 190 esquina con antiguo camino a San Jacinto Amilpas cumplen con funciones administrativas pero se encuentran en condiciones de abrir y funcionar en su totalidad en cualquier momento, apunto el representante de la empresa.