En las tribunas; un juego de alta tensión
Excelsior
CIUDAD DE MÉXICO.-
El partido entre las selecciones de México y Rusia (sábado 24) en la Copa Confederaciones pone en alerta a la FIFA, que busca que el juego no sea atrapado por la violencia entre seguidores de estos dos países.
Rusia y México se enfrentan este sábado para disputar el encuentro de la tercera jornada en el estadio Kazán Arena. Este encuentro puede llegar a ser incómodo para muchos, ya que se puede presentar el famoso grito que los aficionados le hacen al portero rival al momento del despeje de puerta.
Según un estudio realizado por el proyecto Nonviolence, mismo que se encarga de analizar actividades deportivas con el fin de terminar con la violencia, cataloga este partido como “semáforo rojo”.
Esto no le puede hacer mucha gracia a la afición local, que al igual es famosa por su mal comportamiento en competiciones internacionales de su selección, y se desconoce cuál puede ser su reacción ante la afición azteca. Este es el motivo que pone en preocupación a la FIFA.
Llamado del Tri
La Selección Mexicana hizo un llamado -vía Twitter- a toda la afición que pueda presentarse en el estadio para apoyar al equipo, a dejar de hacer el grito al portero rival y no perjudicar más al cuadro tricolor, que busca su pase a la siguiente ronda de la Copa Confederaciones de Rusia.
La FIFA le ha dado demasiada importancia al famoso grito “homofóbico” por parte de la afición mexicana, y además de manifestar la preocupación ante una posible violencia, lleva meses intentando apagar este grito, y advierte que puede haber otras sanciones en contra de la Selección de México.
El Tricolor busca terminar con esta situación lo más pronto posible para no sufrir sanciones más fuertes de la FIFA.