Derecho a Saber
Necesario el fomento de la acción comunicativa de las mujeres
Teresa Monserrat Castillo Ruiz*
A pocos días de terminar el 2012, el Congreso del Estado de Oaxaca, aprobó, por unanimidad, declarar 2013 como año de la Protección de los Derechos de la Mujer, lo que significará la apertura de una partida presupuestal especial para atender el problema de la violencia contra las mujeres.
Al parecer las cifras de mujeres víctimas de la violencia, preocupó al legislativo. Las estadísticas son alarmantes. Se reportan, en la entidad, 546 mujeres muertas en los últimos diez; de éstas 90 casos se reportaron en 2012.
El feminicidio es la forma última y más extrema de la violencia contra las mujeres, antes de él, otras formas de violencia determinan su ciclo de vida; la violencia psicológica, física, económica y sexual, la mayoría de ellas ejercida en sus propios hogares.
La violencia, sin lugar a dudas, ha evitado el ejercicio pleno de los derechos humanos de las mujeres. En este escenario, los medios de comunicación tienen una responsabilidad fundamental. Según palabras de la doctora Aimeé Vega Montiel, los derechos humanos de las mujeres apuntan a la comunicación como base para la realización de la libertad, igualdad, equidad, solidaridad, inclusión, diversidad, universalidad, y participación. En otras palabras, la comunicación nos daría la posibilidad de dirigir, crear y producir espacios y contenidos mediáticos que defiendan la igualdad entre hombres y mujeres.
Ante este escenario de comunicación, el panorama es poco alentador, comenzando por la poca participación de las mujeres en la vida pública, un ejemplo de ello es que 19 municipios de los 570 de Oaxaca son gobernados por mujeres y muchas de ellas no son sujetas de acción y/o protagonistas de hechos noticiosos en los medios informativos.
Por otra parte, la radio, la prensa, la televisión y los medios digitales, han tenido una tendencia a reproducir estereotipos sexistas, mostrando a las mujeres como vulnerables y adjudicándolas al espacio doméstico. En los medios, las mujeres son madres, esposas y amas de casa. En otros escenarios son mostradas como objetos sexuales y dependientes del consumismo y la moda.
En su rol de productoras de contenidos mediáticos, las mujeres van ocupando lentamente espacios, sin embargo muchas de ellas, han sido limitadas a cubrir fuentes vinculadas a su condición de género. Aunado a esto, pocas mujeres asumen un puesto directivo en los medios de comunicación lo que las limita a tomar decisiones fundamentales en su labor comunicativa.
Parafraseando algunos puntos de la iniciativa de ley de la Red de investigadoras por la vida y la libertad de las mujeres, me permito hacer las siguientes consideraciones.
Es imprescindible para el fomento de la acción comunicativa de las mujeres:
1. Transversalizar la regulación de los medios de comunicación con perspectiva de género
2. Abrir mayores oportunidades a las mujeres, en puestos directivos de los medios de comunicación para que sean difusoras de los derechos humanos.
3. Fomentar en las empresas informativas, la capacitación constante de un lenguaje incluyente sin estereotipos que afecten la integridad de hombres y mujeres.
4. La Autoregulación con perspectiva de género con el fin de fomentar, el desarrollo de directrices profesionales, códigos de conducta y otras formas de autoregulación.
5. Finalmente, garantizar la paridad entre hombres y mujeres, para que ambos ejerzan libremente su derecho a la información y la comunicación.
oaxaca.amedi.vinculacion@gmail.com
Necesario el fomento de la acción comunicativa de las mujeres
Teresa Monserrat Castillo Ruiz*
A pocos días de terminar el 2012, el Congreso del Estado de Oaxaca, aprobó, por unanimidad, declarar 2013 como año de la Protección de los Derechos de la Mujer, lo que significará la apertura de una partida presupuestal especial para atender el problema de la violencia contra las mujeres.
Al parecer las cifras de mujeres víctimas de la violencia, preocupó al legislativo. Las estadísticas son alarmantes. Se reportan, en la entidad, 546 mujeres muertas en los últimos diez; de éstas 90 casos se reportaron en 2012.
El feminicidio es la forma última y más extrema de la violencia contra las mujeres, antes de él, otras formas de violencia determinan su ciclo de vida; la violencia psicológica, física, económica y sexual, la mayoría de ellas ejercida en sus propios hogares.
La violencia, sin lugar a dudas, ha evitado el ejercicio pleno de los derechos humanos de las mujeres. En este escenario, los medios de comunicación tienen una responsabilidad fundamental. Según palabras de la doctora Aimeé Vega Montiel, los derechos humanos de las mujeres apuntan a la comunicación como base para la realización de la libertad, igualdad, equidad, solidaridad, inclusión, diversidad, universalidad, y participación. En otras palabras, la comunicación nos daría la posibilidad de dirigir, crear y producir espacios y contenidos mediáticos que defiendan la igualdad entre hombres y mujeres.
Ante este escenario de comunicación, el panorama es poco alentador, comenzando por la poca participación de las mujeres en la vida pública, un ejemplo de ello es que 19 municipios de los 570 de Oaxaca son gobernados por mujeres y muchas de ellas no son sujetas de acción y/o protagonistas de hechos noticiosos en los medios informativos.
Por otra parte, la radio, la prensa, la televisión y los medios digitales, han tenido una tendencia a reproducir estereotipos sexistas, mostrando a las mujeres como vulnerables y adjudicándolas al espacio doméstico. En los medios, las mujeres son madres, esposas y amas de casa. En otros escenarios son mostradas como objetos sexuales y dependientes del consumismo y la moda.
En su rol de productoras de contenidos mediáticos, las mujeres van ocupando lentamente espacios, sin embargo muchas de ellas, han sido limitadas a cubrir fuentes vinculadas a su condición de género. Aunado a esto, pocas mujeres asumen un puesto directivo en los medios de comunicación lo que las limita a tomar decisiones fundamentales en su labor comunicativa.
Parafraseando algunos puntos de la iniciativa de ley de la Red de investigadoras por la vida y la libertad de las mujeres, me permito hacer las siguientes consideraciones.
Es imprescindible para el fomento de la acción comunicativa de las mujeres:
1. Transversalizar la regulación de los medios de comunicación con perspectiva de género
2. Abrir mayores oportunidades a las mujeres, en puestos directivos de los medios de comunicación para que sean difusoras de los derechos humanos.
3. Fomentar en las empresas informativas, la capacitación constante de un lenguaje incluyente sin estereotipos que afecten la integridad de hombres y mujeres.
4. La Autoregulación con perspectiva de género con el fin de fomentar, el desarrollo de directrices profesionales, códigos de conducta y otras formas de autoregulación.
5. Finalmente, garantizar la paridad entre hombres y mujeres, para que ambos ejerzan libremente su derecho a la información y la comunicación.
oaxaca.amedi.vinculacion@gmail.com
