Continúan movilizaciones en contra de administración del estado

Águeda Robles.          

Oaxaca se convierte en un polvorín con ayuda de grupos políticos que apoyaron el arribo de la coalición al poder; y ante la ineficacia que han presentado autoridades al frente de diferentes dependencias de la administración de Gabino Cué Monteagudo sostuvieron pobladores de la agencia de Santa Cruz Tepenixtlahuaca.

Como desafortunadamente se está haciendo costumbre el grupo de habitantes arribó al palacio de Gobierno para exigir a las autoridades presten atención a los conflictos post electorales que se están presentando en la entidad, ya que estos podrían desembocar en un río de sangre en comunidades como en la de ellos en donde existen grupos armados apoyados por la ETA de origen español.

En entrevista quien fuera guarda espaldas del Gobernador Diódoro Carrasco Altamirano y que encabeza a los pobladores de Tepenixtlahuaca, Juan Jesús Cruz Jiménez indicó que la agencia pertenece al municipio de Tataltepec de Valdés Juquila quien no les permitió participar en el proceso electoral pasado en el que instalaron como edil a Fortunato Rosales Robles.

Ante esta irregularidad han solicitado mesas de dialogo con las autoridades locales, sin embargo hasta el momento esta les ha negado su participación aunque representan el 45 por ciento del total de la población, mientras que la cabecera solo tiene el 40 y el resto lo constituyen los núcleos rurales. Por lo tanto debieron tener derecho a participar en la elección.

“…A pesar de ser el pueblo más grande del municipio los actuales caciques de Tataltepec que son: Armando Ríos Hernández, Fermín Ríos Hernández, Adrián Gómez Torres, Noé Mateo, Herminio Mejía Cruz y Rafael Martínez maniobraron en nombre de los usos y costumbres para no permitirnos votar el 6 de octubre del 2013”.

En años anteriores han participado en el proceso de nombramiento de la autoridad municipal, sin embargo en este caso no se los permitieron pues no apoyarían al candidato de los caciques que tuvo un proceso penal con sentencia judicial, lo que además viola la propia normatividad interna del municipio.

Con la complicidad del Presidente Consejero del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana, Alonso Criollo se dio posesión del cargo y desde esa fecha se han hecho presentes las represalias en contra de su comunidad.

Explicó que Rosales Robles en 1999 fue presidente del comisariado de bienes comunales de la población, “…y durante ese periodo recibieron dinero y armas de españoles que pertenecían a la ETA (Euskadi Ta Askatasuna), dueños de la empresa Tachapuesa quienes tenían un aserradero y una maderería en Puerto Escondido. Estas personas en el 2002 fueron extraditados.

Sin embargo previo a su salida del país armaron un grupo paramilitar que cuidaba el saqueo de la madera y que hoy están reactivando; además en ese entonces secuestraron y torturaron a tres ciudadanos de su agencia a quienes amarraron y encarcelaron en Tataltepec.

GRUPO ARMADO

Pese a que durante la administración de José Murat Casab se firmó un pacto de paz, hoy en día al surgir el conflicto post electoral que no han atendido las autoridades, se reactivó el grupo armado, “…en estos momentos Ríos Naranjo y Adrián Gómez encabezan lo que ellos llaman autodefensas y tienen armas de alto poder que ETA les dejó”.

Por ello exigieron al Tribunal Electoral de Oaxaca salvaguarde sus derechos ciudadanos e invalide el proceso validado por el IEEPCO “…quien impuso a un delincuente en la presidencia municipal de nuestro ayuntamiento”.

INICIAN LAS PROTESTAS

Ante la falta de atención por parte de las autoridades los pobladores se irritaron y arribaron a la puerta de palacio de gobierno en donde exigieron mesa de dialogo, sin embargo ante la falta de esta, golpearon la puerta y abrieron las ventanas de la casa del pueblo.

Al interior del recinto se encontraba el gobernador y los funcionarios del gabinete que llevaban a cabo la “reunión de seguridad para semana santa” por lo que elementos de la policía de la secretaria de seguridad pública de Oaxaca del equipo antimotines arribaron a la calle de Bustamante en donde permanecieron para evitar un mayor desmán.