¿Alianzas sin ideas?…

Excelsior

14 de Julio de 2017

En marcha están conversaciones orientadas a concretar una eventual alianza y/o coalición de gobierno que les permita enfrentar con éxito las presidenciales del próximo 2018, sus principales protagonistas y promotores, el indefinido Ricardo Anaya Cortés y la saliente Alejandra Barrales Magdaleno, pretenden ignorar las profundas diferencias de fondo que, igual en el pasado que ahora, impiden a panistas y perredistas, ir más allá de un simple y pragmático acuerdo electoral, como los muchos que han signado ya, sin más propósito que derrotar al priismo…o, ahora, al lopezobradorismo.

No son pocas las voces que, igual al interior del blanquiazul que del sol azteca se han levantado para hacer notar que, a lo que se ve, la antinatural propuesta impulsada por sus dirigencias no parece atender, sino al particularísimo interés de uno por hacerse, finalmente, con la candidatura presidencial del otrora partido de la gente decente y, en el caso de su par, con la posibilidad de alcanzar la nominación común por la jefatura de Gobierno de la naciente Ciudad de México, en manos de la izquierda (institucionalizada) desde 1997.

Ejemplos de cómo las alianzas entre el Partido Acción Nacional y el Partido de la Revolución Democrática no han tenido más propósito que hacerse con el poder en un municipio o estados en particular; de cómo el gobernante en turno, entronizado en el poder, opta por sus propias políticas e ideas, dejando de lado las elementales propuestas de los partidos que le postularon y, adicionalmente, se rodea de sus incondicionales, sobran… Oaxaca con Gabino Cué Monteagudo, Sinaloa con Mario Malova López Valdez antes o, ahora, Quintana Roo con Carlos Joaquín González o Veracruz del cuestionado Miguel Ángel Yunes Linares son más que ilustrativos del actuar que, ya en el poder, asumen los promovidos…¡expriistas todos, curiosamente!

Ahora mismo, el Congreso local veracruzano es escenario de un encendido debate que, merced a una iniciativa para regularizar las denominadas “uniones de hecho” presentada por la diputada María Josefina Maryjose Gamboa Torales, cercana al grupo del gobernador, enfrenta a panistas (afines a la tradicional doctrina partidista) y priistas por un lado, y perredistas y panistas (“de hoy”) por el otro…por razones de fondo; esas que, a la vista la propuesta de avanzar hacia un frente que, en el supuesto de ganar, se comprometa a gobernar con base en una plataforma común, consensuada, son ideas, principios y valores que, al margen consideraciones de otra índole, difícilmente podrán armonizarse.

La sola afirmación de la promotora de la controversial iniciativa, según reseña de XEU.com.mx, en el sentido de que su propuesta “se consensuó con la comunidad LGBTI, y si la Iglesia —¿o el panismo tradicional?— la rechaza sería por una cuestión de homofobia… porque se cuidó que no hablara de matrimonio, para no levantar polémicas”, confirma lo dicho: construir un Frente Amplio Opositor o Democrático, según el caso, exigirá más que de la ambición o interés pragmático de quienes lo impulsan.

ASTERISCOS

* Más de uno se preguntaba ayer si, ¡ahora sí!, Gerardo Ruiz Esparza, el cuestionado titular de SCT, dejará por voluntad propia el cargo o si, en su defecto, deberá removerlo su jefe la irresponsabilidad y negligencia mostrada en el cumplimiento del encargo, a la luz de las pruebas existentes en el caso del socavón que se abrió en el Paso Exprés, y costó la vida a dos personas, en Cuernavaca, hacen inviable su permanencia.

* Tras ventilarse en Medios la posible comisión de actos de corrupción de Grupo Industrial JPDR, SA, propiedad de Lino Romo Gómez (que ahora negocia “estatus” de refugiado político en EU) con Pemex Gas y su exsubdirector Luis Sánchez Graciano, todo apunta a que el órgano interno de control de Pemex tomó ya en sus manos el caso: la construcción de un gasoducto al amparo del contrato PGDB-SD-GRM-0026/2014…

Veámonos el domingo, con otro asunto De naturaleza política.