Leyenda ‘Mártires del 10 de junio de 1971’ reluce en Congreso CDMX

CIUDAD DE MÉXICO.

En el Congreso de la Ciudad de México, se celebró una Sesión Solemnepara colocar en letras doradas la leyenda “Mártires del 10 de junio de 1971” en memoria de los estudiantes masacrados la tarde del jueves de Corpus por militares y halcones, cuando el presidente de la República era Luis Echeverría Álvarez.

Jorge Gaviño, líder de la bancada del PRD, recordó así aquella tarde “48 años han pasado… Eran poco más de las 5 de la tarde, ocho mil o 10 mil jóvenes inconformes, estudiantes, obreros, pueblo… del Casco de Santo Tomas, Avenida de los Maestros…una granada, halcones con varas de bambú, cientos de halcones coordinados con la Policía; confusión, golpes, gritos, lucha campal… La parca adueñándose de la calle, la muerte enseñoreándose con lo más preciado, con lo que nunca debe de morir, la juventud”.

Mientras que el presidente de la Mesa Directiva y uno de los líderes del movimiento estudiantil de 1968, José de Jesús Martín del Campo, aseveró que meses después de la matanza del 10 de junio de 1971, donde fueron asesinadas más de 100 personas, se reunieron evidencias que mostraron que la matanza fue un crimen de Estado y leyó un diálogo entre dos de los altos mandos que coordinaron el ataque contra los estudiantes:A las 5:25, en uno de los instantes de mayor refriega, se dio un largo diálogo que leo a continuación:

(Cambio) – a pie se fueron a atacar a los manifestantes.
Cambio) Se siguen escuchando disparos. (Cambio) Se repliegan ahora los manifestantes sobre la Avenida de los Maestros.
Cambio) Por la México-Tacuba y Melchor Ocampo. Acaba de llegar un camión de Halcones.
Cambio) Aproximadamente 70 Halcones. (Cambio) Acaba de llegar el camión,
recíbanlo.
Cambio) Infórmenme. Se está replegando la columna de estudiantes. ¿A qué altura? (Cambio) Se continúan escuchando disparos en forma más persistente. (Cambio) Ya están todos en combate, ya hay muchos heridos y probablemente muertos”

Martin del Campo expresó que uno de los actos más cobardes del presidente Echeverría fue tratar de hacerle creer a la gente que el jueves de Corpus hubo un enfrentamiento entre militares y jóvenes armados, tratando así de que la población no supiera que lo que ocurrió fue una masacre perpetrada por el gobierno.

Y la ruta hacia la justicia fue muy larga fue hasta el 10 de junio de 2002 “que fue presentada la primera denuncia de hechos sobre la masacre del 10 de junio del 71 ante la Fiscalía para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado, de la Procuraduría General de la República, la FEMOSPP, esa primera denuncia fue la mía, más adelante lo hicieron -así nos habíamos puesto de acuerdo- Raúl Álvarez Garín, Pablo Gómez y otros compañeros. Necesitábamos que se abriera”.