El Gobernador Alejandro Murat commemora otro año luctoso de Don Vicente Guerrero.

Paloma Duarte

El gobernador del Estado, Alejandro Murat Hinojosa acudió a Cuilapam a conmemorar la muerte de Don Vicente Guerrero ocurrida en esa comunidad un 14 de febrero de 1831, luego de que el caudillo fuera condenado a la pena capital, por un consejo de Guerra.

El mandatario recordó que se han cumplido 186 años del fusilamiento del insurgente Don Vicente Guerrero, que se inició en la lucha por la Independencia de México en las filas del ejército de José María Morelos y Hermenegildo Galeana.

Ante la presencia de los alumnos del Colegio de Bachilleres del Estado de Oaxaca (COBAO) sostuvo que la traición del marino genovés Francisco Picaluga lo puso en manos de sus enemigos y, fue fusilado en Cuilapan, Oaxaca, el 14 de febrero de 1831.
La Historia

Vicente Ramón Guerrero Saldaña nació en Tixtla, actual estado de Guerrero, el 9 de agosto de 1782, hijo de Pedro Guerrero y Guadalupe Saldaña, humildes campesinos y arrieros. El joven Guerrero también trabajó de arriero, lo que le permitió conocer los caminos, veredas, manantiales, grutas, barrancas y cumbres en el extenso territorio del sur de la Nueva España.

A los 27 años se incorporó a las filas insurgentes de Morelos y al Batallón de Guadalupe comandado por Hermenegildo Galeana, participando en diversas batallas, muchas de las cuales resultó victorioso, derrotando a prestigiados militares realistas que comandaban tropas mejor alimentadas, entrenadas y armadas.

Entre ellos a Lamadrid, Samaniego, Zavala, Reguera, Armijo. Morelos lo nombró Capitán y le ordenó tomar la población de Taxco. En la Batalla de Izúcar, derrotó al brigadier Ciriaco de Llano. Al lado de Morelos combatió en el sur de Puebla y participó en la toma de de Oaxaca de noviembre de 1812.

Después de la derrota de Matamoros en Puruarán en 1814, se le comisionó para combatir en el sur. Y, tras el fusilamiento de Morelos, parecía que la lucha insurgente languidecía, pero desde diversos puntos, la lucha insurgente continuó al mando de Vicente Guerrero, Ignacio Rayón, Juan Álvarez entre otros.

Guerrero permaneció en las armas, primero en las montañas del sur con la colaboración de Juan del Carmen, su lugarteniente de Costa Chica. Más tarde reapareció en Tierra Caliente y extiende sus triunfos por las regiones Norte y Centro, compartiéndolos con Pedro Ascencio de Alquisiras.

El 15 se septiembre de 1818, Vicente Guerrero derrotó al realista Armijo en Tamo y, siguió su lucha en Santa Fe, Tetela del Río, Huetamo, Tlachapa, Axuxchitlán y Cuautotitlán. Once años de guerra dejaron un territorio devastado, ni los realistas fieles a la Corona española, ni los insurgentes, que peleaban por la Independencia siguiendo el legado de Hidalgo, Allende, Matamoros y Morelos podían triunfar. La mayoría de la población novohispana deseaba la paz.

Picaluga le tomó preso trasladándolo a las bahías de Huatulco (playa La Entrega), donde lo entregó al capitán Miguel González. Luego de que en Oaxaca un Consejo de Guerra lo condenó a la pena capital, fue fusilado en el convento de Cuilapan, en la mañana del 14 de febrero de 1831. Entre los documentos que le encontraron al ser detenido se halla una proclama al pueblo de México. Hoy Cuilapan se llama de Guerrero

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