CTM sigue siendo el brazo golpeador del Gobierno de Oaxaca
En la conmemoración del CCXIII aniversario del nacimiento de Benito Juárez García, se congregaron en Guelatao, la tierra que lo vio nacer, miles de visitantes, entre ellos el presidente de la República Mexicana, Andrés Manuel López Obrador y desde luego el gobernador del estado de Oaxaca, Alejandro Ismael Murat Hinojosa, pero también acudieron manifestantes que aprovecharon la ocasión para gritar consignas y lanzar protestas.
Entre estos, resaltaron maestros pertenecientes a la Sección XXII de la CNTE, una de sus acciones de protesta que se notó más, fue la manta en la que escribieron: “Juicio popular a José y Alejandro Murat, por la masacre de agua fría y sus 300 feminicidios”, además de múltiples consignas contra el gobierno priista y la reforma educativa, mismos agravados con el bloqueo de unidades de transporte público con las que pretendían como siempre, impedir el acceso al evento.
Ante esta situación no vimos que las fuerzas de seguridad del gobierno estatal o federal accionaran, garantizando el libre tránsito, pero a quienes sí vimos, fue a las fuerzas “porriles” de la CTM, que en Oaxaca dirige Carlos Mejía Gil, como Secretario General de este órgano, que otrora tiempos servía como el brazo fuerte y represor del gobierno en turno, sin embargo hoy, comprobamos que sigue siendo el único que está al servicio del gobierno priista y que enfrenta todo como sea ‘necesario’.
Al más puro estilo de los 70’s, hizo su presencia la CTM, con el acarreo de más de 400 personas y lo que esto implica, transporte, comida y ropa distintiva para cada uno de ellos, incluyendo su respectivo ‘agradecimiento’, acompañados todos con música de banda y un comité ataviado con trajes típicos, mostrando un gran dispendio de recursos, muy contrario a lo que las nuevas políticas exigen, austeridad total, la misma que predica el actual Presidente López Obrador y su Partido MORENA, todo esto, desde luego sin presentar un informe de la cantidad de gastos que implica una movilización así, toda vez que se amparan en ser un organismo independiente del gobierno federal.
Pero la parte que más llama la atención es cómo Carlos Mejía Gil, presentó a su grupo de choque, más de 70 golpeadores armados como siempre, con quienes quitó la manta que pedía juicio popular para su jefe Alejandro Murat y su padre.
La violencia no estalló porque los manifestantes no hicieron frente a semejante afrenta, pero a muy poco estuvimos de ver un acto de enfrentamiento y violencia entre dos grupos antagónicos.
El evento finalmente se desarrolló sin mayor conflicto y en un ambiente cálido entre el gobierno federal de López Obrador y el Estatal, de Murat Hinojosa.
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