Sube a 18 la cifra de muertos por ataque terrorista en Costa de Marfil
YAMUSUKRO, Costa de Marfil, mar. 14, 2016.- La cifra de muertos del ataque terrorista perpetrado este domingo en un complejo hotelero de una famosa zona costera de Costa de Marfil aumentó a 18, dos más que en el último balance, informaron medios locales.
Las víctimas son 15 civiles y tres soldados de las fuerzas especiales, además de los tres asaltantes, según informó el Gobierno marfileño, que previamente había asegurado que era seis los milicianos abatidos.
“Estos cobardes ataques terroristas no serán tolerados en Costa de Marfil”, declaró a los medios el presidente del país, Alassane Ouattara, y aseguró que la situación “está bajo control” y que la “calma ha vuelto a Grand Bassam”, la playa donde se produjo el atentado.
Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) reivindicó ayer el atentado, el primero en Costa de Marfil, y lo enmarcó en la campaña de terror que está llevando a cabo contra hoteles y zonas turísticas frecuentadas por occidentales en el Sahel.
A mediodía del domingo, tres atacantes armados con fusiles kalashnikov y granadas irrumpieron en la primera línea de playa y al grito de “Allahu akbar” (Alá es grande) empezaron a disparar indiscriminadamente contra gente que estaba allí.
“Estaba tomando algo en la terraza del bar del hotel cuando de repente escuché disparos y la gente empezó a correr”, contó a Efe por teléfono el empresario español Jordi Martínez, propietario de La Playa, un pequeño hotel situado en Grand Bassam.
“Al principio creíamos que se trataba de un robo en alguno de los hoteles, pero nos dimos cuenta de que algo iba mal porque los disparos no paraban”, añadió Martínez.
En los últimos meses, AQMI ha intensificado sus ataques en la región después de haber declarado que los ciudadanos occidentales, y más concretamente los de Francia, se han convertido en objetivo prioritario del grupo.
En enero un comando de este grupo atacó el hotel Splendid de Uagadugú y mató a 26 personas y en noviembre otro ataque similar en Bamako dejó otros 27 muertos, entre empleados y clientes del hotel.