Excursionista RESBALA de una MONTAÑA, cae a 120 metros de altura y muere

El excursionista y sus compañeros tomaron el camino equivocado para ascender la montaña.

MILENIO

Un excursionista de 38 años murió después de que se resbaló por una pendiente helada cuando estaba tratando de subir la montaña Pedraforca, en sierra del Cadí, Cataluña, y cayó a una altura de 120 metros.

Otras dos personas estaban con el excursionista, quienes no resultaron heridas, pero fueron trasladadas al campo de fútbol de Saldes para recibir atención psicológica tras ser testigos del accidente que acabó con la vida de su compañero, vecino de Barcelona.

Los tres excursionistas salieron por la mañana del 1 de mayo del refugio Lluís Estasen, con la finalidad de llegar a la cima el Pedraforca, pero se equivocaron de camino y casi sin querer tomaron una peligrosa vía de escalada, ‘la Pany’, y no estaban preparados para subir por ahí.

Como el estado del terreno era complicado y resbaladizo por las heladas, uno de ellos perdió el equilibrio en una pendiente y terminó cayéndose. Pero los Bomberos de la Generalitat aseguraron que no había un mal clima a pesar de que la niebla ya había aparecido a primera hora.

Médicos no logran salvar la vida del excursionista

Alrededor de las 11:00 horas, las fuerzas de seguridad y equipos de rescate recibieron una llamada de emergencia, por lo que llegaron al lugar de los hechos para localizar al hombre que se cayó, extraerlo con cuerdas y llevarlo en helicóptero para que fuera atendido, pero sólo pudieron certificar su muerte.

La policía de Cataluña se hizo cargo de las diligencias y del levantamiento el cuerpo. Todo indica que se trató de un accidente mortal tras deslizarse por una pendiente helada mientras se ascendía por la vertiente norte de la montaña.

El Pedraforca es una montaña icónica que se encuentra en la sierra del Cadí, en el centro del Parque Natural del Cadí-Moixeró, marcando el límite entre las provincias de Barcelona y Lleida. Su imponencia compite con la de las montañas del Pirineo.

Se trata de una montaña a la que llegan más de 200 personas diarias en verano, en la que además se generan muchos accidentes, especialmente en la tartera y algunos de ellos han sido mortales.

Cada año se lamentan varias víctimas, algunos excursionistas infravaloran el riesgo de subir esta montaña y al bajarla, ya que no llevan el material de escalada adecuado, por lo que están más propensos a sufrir accidentes graves al momento de ascender el Pedraforca.

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