Se le deshace México entre las manos a López Obrador
DETRÁS DE LA NOTICIA
Alfredo Martínez de Aguilar
* Las críticas no menudean: Si este gobierno no construye ni resuelve problemas, que no destruya y complique más las cosas, como el aeropuerto, gas, luz y suministro de medicamentos y vacunas.
* El primer motín de gran trascendencia por su repercusión político-electoral, se dio ayer entre los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación al destituir a su presidente.
La ley universal de los contrarios enseña que, a querer o no, hay una justicia inmanente y/o divina, si se es creyente, producto de las dualidades y principios binarios que rigen el universo todo.
La ciencia sintetiza de manera racional en la Tercera Ley de Newton el principio que da origen indefectiblemente al fenómeno de la causa y efecto, dada la correspondencia o reciprocidad.
«Para toda acción hay siempre una reacción opuesta e igual. Las acciones recíprocas de dos cuerpos entre sí son siempre iguales y dirigidas en sentido opuesto», explica la crisis de México.
El problema de fondo es la crisis política, toda vez que todas las acciones e inacciones de los seres humanos son eminentemente políticas, amén que en la vida y en la política no hay espacios vacíos.
La ya de suyo difícil situación económica, que de manera permanente enfrenta nuestro país en el último medio siglo, se ha agravado por la crisis humanitaria planetaria provocada por la pandemia.
Esta es una poderosa causa ajena a la voluntad de pueblo y gobierno, sin embargo, nadie puede dejar de reconocer con honestidad y objetividad que hay otras razones atribuibles al gobierno.
Nadie en su sano juicio puede pasar por alto los crasos errores políticos del presidente Andrés Manuel López Obrador al fomentar cotidianamente desde Palacio Nacional la polarización.
Ciertamente, es una eficaz cuanto perversa maniobra aplicar a diario la estrategia divide y vencerás, porque esta lleva, necesaria y obligadamente, a la confrontación permanente al pueblo.
No obstante, la eficiencia lograda en este renglón por el gobierno, no se han hecho esperar reacciones dentro y fuera de Morena y la 4T que deshacen el país en las manos a AMLO.
Las críticas no menudean: Si este gobierno no construye ni resuelve problemas, que no destruya y complique más las cosas, como el aeropuerto, gas, luz y suministro de medicamentos y vacunas.
Sobre todo, cuando de manera incongruente cada día son más conocidos los escándalos de corrupción de los hijos y familiares, hermanos y primos, del presidente López Obrador.
La empresa que apoyará con el desabasto de Gas LP es Cava Energy, negocio de los padres de Carolyn Adams, esposa de José Ramón, quien se encarga de surtir gasolina de la mano de SEDENA.
A pesar de ser un consumado y contumaz animal político, el presidente López Obrador como todo ser humano, no las tiene todas consigo, al fin falible y limitado con todo y su genial perversidad.
La consulta para la revocación del mandato, enfrenta el grave problema que el Congreso federal sigue sin expedir la respectiva ley reglamentaria sin la cual no será posible realizar el proceso.
El primer motín de gran trascendencia por sus repercusión político-electoral, se dio ayer entre los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación al destituir a su presidente.
Por unanimidad, los magistrados del TEPJF aprobaron este miércoles remover a José Luis Vargas como presidente del organismo al argumentar diversas irregularidades durante su gestión.
La sesión en la que se discutió la remoción fue convocada por la magistrada Janine Otálora como “presidenta por ministerio de ley” ante la ausencia del magistrado presidente durante la sesión.
Antes de elegir al magistrado Reyes Rodríguez Mondragón para sustituir al presidente Vargas, al exponer sus argumentos, el magistrado Felipe de la Mata aclaró a sus compañeros magistrados:
“A este tribunal no venimos a satisfacer los intereses de nadie, ni a hacernos populares, a este tribunal llegamos para mejorar el sistema electoral mexicano. No estamos aquí para reforzar nuestros beneficios particulares o de grupo, mucho menos para beneficiar a grupos de poder o a gobernantes”.
Previamente, el magistrado presidente del Tribunal, José Luis Vargas, aseguró que no renunciará al cargo, pese a la solicitud de evaluación a su desempeño que pidieron los magistrados durante la sesión pública de este miércoles.