¿Quién es Eva Ramón Gallegos, científica mexicana que lidera la lucha contra el VPH?
Conoce a la científica del IPN, que lidera investigaciones innovadoras en el tratamiento del VPH.
MILENIO
La doctora Eva Ramón Gallegos lleva años revolucionado el panorama científico con sus avances en el tratamiento del Virus del Papiloma Humano (VPH).
Reconocida por su dedicación, trayectoria y espíritu innovador, esta científica mexicana del Instituto Politécnico Nacional (IPN) lidera investigaciones que prometen transformar la lucha contra este virus, principal causa del cáncer cervicouterino.
Una trayectoria marcada por la excelencia
Eva Ramón Gallegos inició su camino en el ámbito científico al graduarse como Química Farmacéutica Bióloga de la Universidad Veracruzana.
Su preparación académica continuó en la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del IPN, donde obtuvo su maestría y doctorado en Ciencias Químicobiológicas, ambos con mención honorífica.
Además de sus estudios, Ramón Gallegos realizó estancias de investigación en instituciones como la Universidad Do Minho, en Portugal, y el Centro de Investigación y Estudios Avanzados del IPN.
Desde 2001, forma parte del cuerpo docente e investigador de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del IPN, donde ha desarrollado una carrera destacada como líder en el campo de la biomedicina y la biotecnología molecular.
¿Cómo comenzó su lucha contra el VPH?
En 2012, Ramón Gallegos emprendió una investigación pionera con el objetivo de desarrollar un tratamiento efectivo y no invasivo para erradicar el VPH.
Este proyecto encontró apoyo en organizaciones civiles, instituciones de salud y educativas en Oaxaca, Veracruz y la Ciudad de México.
Su enfoque principal fue la terapia fotodinámica, una técnica que utiliza un compuesto químico fluorescente para identificar y eliminar células dañadas mediante radiación láser.
En junio de 2018, los resultados de su investigación arrojaron cifras esperanzadoras: de un total de 990 mujeres analizadas, se seleccionaron 480 para el tratamiento, de las cuales 29 pacientes en la Ciudad de México lograron erradicar el virus al 100%.
Este logro marcó un hito en la lucha contra el cáncer cervicouterino, al demostrar la eficacia de la terapia en lesiones premalignas de bajo grado.
La terapia fotodinámica permite eliminar células dañadas sin afectar las estructuras sanas. Aunque su eficacia disminuye en lesiones de mayor grado, sigue siendo una herramienta prometedora para combatir el VPH, explicó Ramón Gallegos.
¿En qué consiste el tratamiento?
El procedimiento desarrollado por la doctora utiliza un fármaco llamado ácido delta aminolevulínico, que, al aplicarse en el cuello del útero, se transforma en una sustancia química fluorescente que se acumula en las células infectadas.
Posteriormente, estas células son eliminadas mediante un rayo láser. El tratamiento es personalizado y se aplica en tres sesiones con intervalos de 48 horas.
El equipo liderado por Ramón Gallegos realiza un seguimiento exhaustivo de las pacientes mediante pruebas de diagnóstico como citología, colposcopía y reacción en cadena de la polimerasa (PCR).
Estas herramientas no solo permiten confirmar la eliminación del virus, sino también identificar posibles casos en los que el tratamiento no sea efectivo, como ocurrió en algunos pacientes con lesiones avanzadas.
El legado de Eva Ramón Gallegos
La doctora Eva Ramón Gallegos ha dedicado casi dos décadas a investigar la terapia fotodinámica y su aplicación en distintas neoplasias, incluyendo melanoma, cáncer de mama y cáncer cervicouterino.
Esta labor ha sido reconocida con numerosos premios, entre los que destacan el Premio Nacional en Ciencia y Tecnología de Alimentos (2011), la Medalla al Mérito en Ciencias y Tecnología (2012) y el reconocimiento de Forbes como una de las 100 mujeres más poderosas de México en 2019.
“Desde pequeña escuchaba a mis padres hablar de esa enfermedad del cáncer que mataba a la gente, incluso a algunos familiares o amistades y yo sentía curiosidad por saber más acerca de esa enfermedad”, recordó la doctora Eva Ramón Gallegos, quien también destaca la influencia de sus mentores en su formación profesional.
A pesar de los avances significativos, Ramón Gallegos señala que su trabajo es un proyecto piloto que requiere mayor financiamiento y ampliación de muestras para tratar lesiones de mayor gravedad.