Promueve IMSS el uso de técnicas de relajación para mantener el bienestar físico y mental
Se recomienda adoptar alguna de estas herramientas para mantener la calma, mejorar la calidad del sueño y favorecer la sensación de bienestar general.
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COMUNICADO
La práctica regular de estas actividades brindará un enfoque más positivo a los desafíos diarios.
Psicólogos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recomiendan el uso de técnicas para mantener el equilibrio físico y mental, como la respiración diafragmática y la relajación progresiva de Jacobson; herramientas útiles para reducir los niveles de estrés, manejar crisis emocionales, disminuir la ansiedad y prevenir problemas relacionados con la salud mental.
Al respecto, el psicólogo Tomás Delfino Alcántara Ramírez, líder de proyectos en la Coordinación de Salud Mental y Adicciones, detalló que las principales ventajas de la respiración diafragmática son: regular el sistema nervioso al activar el estado de calma del cuerpo, mejora la oxigenación y favorece la sensación de bienestar físico, además, ayuda a enfocar la mente, promueve la concentración y es de gran utilidad para reconectar con nuestro centro.
Por otro lado, señaló que la relajación progresiva de Jacobson se enfoca en la tensión y relajación muscular, también fomenta la conciencia corporal, mejora la calidad del sueño y promueve la flexibilidad emocional al liberar las presiones acumuladas derivadas de la vida cotidiana.
Agregó que además de controlar el estrés y algunos problemas mentales, ambas técnicas ayudan a mejorar la calidad del sueño, ya que reduce la actividad del sistema nervioso simpático. Esto disminuye la tensión física y mental, facilita la conciliación del descanso profundo y promueve una sensación reparadora.
El psicólogo Alcántara Ramírez explicó que el uso de estas técnicas fortalece la capacidad para manejar emociones intensas y recuperarse de situaciones adversas. Como herramientas de autorregulación, aumentan la confianza personal y fomentan un enfoque más positivo frente a los desafíos.
Subrayó que, pese a la facilidad para aplicar y aprender estas técnicas, es fundamental contar con formación en salud mental, lo que permitirá comprender los mecanismos biopsicosociales detrás de estas herramientas y adaptarlas a diferentes contextos y necesidades.
Precisó que, en comparación con otras intervenciones psicológicas, estas técnicas son complementarias a terapias más estructuradas y como herramientas de prevención en el día a día. También, son accesibles para todas y todos, fáciles de aprender y no requieren de equipo especializado para su práctica, únicamente se necesita un lugar cómodo para conectar consigo mismo.
Alcántara Ramírez recomendó practicar una técnica específica durante 5 a 10 minutos al día en un espacio tranquilo, lo ideal sería antes de dormir para alcanzar la relajación máxima del cuerpo y tener un sueño reparador; insistió que la constancia es clave, ya que con el tiempo no solo se vuelve más fácil, sino también más efectivo para enfrentar los retos cotidianos.
Hizo un llamado a la derechohabiencia a acercarse a las más de mil 500 Unidades de Medicina Familiar (UMF) del IMSS para atender cualquier sintomatología relacionada con la salud mental, resolver dudas y, en caso de ser necesario, acudir a los servicios especializados del Instituto.