Padres de familia denuncian instalaciones deficientes de colegio Valladolid
Paloma Duarte
Construido a metros del Río Salado, el Colegio Valladolid ubicado en la Segunda Sección El Llano de San Antonio de la Cal, cuenta con instalaciones deficientes en materia de protección civil, denunciaron los padres de familia.
En conferencia de prensa, Marco Antonio Cortes Téllez, representante de los padres de familia indicó que la directora de la institución educativa Anabel Illandes Aguilar, no cuenta con un plan en caso de que nuevamente se presente un sismo.
Indicó que tras los sismos del 7, 19 y 23 de septiembre la estructura sufrió daños visibles por lo que exigieron les garantizaran la seguridad de sus menores, por lo que la dirección, presentó un dictamen firmado por un Director Responsable de Obra (DRO).
“Nos mostraron un dictamen firmado por el DRO, Jaime Hernández Rodríguez, y se dice que no tienen fallas estructurales, sin embargo los sismos de este mes provocaron que se presenten algunas grietas, situación que nos preocupa pues puede colapsarse”, dijo.
Enfatizó que la construcción no cuenta con salidas de emergencia, tampoco el personal está capacitado, pues el día del sismo de 7.1 grados los docentes abandonaron a los menores al interior de las aulas, poniendo en riesgo su integridad.
“Muchos niños se quedaron en los salones o en las escaleras sin saber qué hacer, mientras los docentes se dirigieron a los patios, ahí vimos que no cuentan con un plan de protección ni están capacitados para mantener a salvo a los menores”, dijo.
Además sostuvo que aunque solicitaron que una comisión de padres hablara con los directivos, estos se negaron, y dieron el informe de que este lunes iniciarían nuevamente las clases, hecho con el que no están de acuerdo.
En este contexto demandaron que se cumplieran los requisitos que esta ordenando el Instituto Estatal de Educación Pública (IEEPO) quien ha informado que en cada uno de los movimientos telúricos que se han presentado deben de presentar un dictamen por un especialista.
La construcción son dos edificios que están uno frente al otro, con un pasillo reducido de un metro de ancho con salida hacia la parte de atrás donde se ubica una cancha con techado estructural, y al frente se ubica la fachada, por lo tanto no son zonas seguras.
“Necesitamos que se garantice la seguridad de los menores porque tememos que vaya a suceder lo que paso con la escuela Enrique Rébsamen que por la negligencia de los constructores, hoy muchos hogares están enlutados”, dijo.
Mencionó que los padres de familia de los 900 alumnos que asisten diariamente a la institución no permitirán el inicio de clases hasta que les sea notificado que el edificio cuenta con las medidas de seguridad para garantizar la vida de sus hijos.