Juan José Jiménez ya prepara a su nieto para que sea la tercera generación de la Chiva Loca

MILENIO
Un personaje histórico de la afición de Chivas ha pasado por mucho, especialmente en la época de la pandemia, donde casi pierde la vida. Hoy, su nieto se prepara para ser la nueva Chiva Loca.
El próximo fin de semana se jugará una edición más del Clásico Tapatío entre Atlas y Chivas, encuentro que se llevará a cabo en el Estadio Jalisco. La imagen de ambos equipos en el inmueble de la Calzada Independencia inmediatamente remonta a los aficionados del Guadalajara a los partidos de antaño, donde en el recuerdo se encuentra la Chiva Loca, siempre apoyando al cuadro rojiblanco. Ahora este personaje va por su tercera generación.
Juan José Jiménez, quien le da vida a este personaje desde un inicio, se dijo contento con la irrupción de Cristofer, su nieto de 9 años, quien ya comienza a seguir los pasos de su abuelo y su padre.
Son casi 40 años de darle vida a este personaje que apoyó a Chivas, antes bajaba hasta a la cancha en el Estadio Jalisco.
“Él (su nieto) solo nos dijo (de disfrazarse como Chiva Loca). Vamos a mandarle a hacer su atuendo como lo que representa la Chiva Loca y como me hacen llamar y aquí estamos”, añadió.
Si bien son casi cuatro décadas de apoyar a Chivas, la vida de Juan José cambió en el 2020, pues el COVID-19 casi le arranca la vida y es algo que nunca olvidará. Fue en octubre de aquel año cuando Juan José se enfermó y cayó a una clínica del IMSS en Guadalajara, donde luchó por su vida.
“La verdad es que sí recuerdo y a nadie se lo deseo, ni al peor enemigo, le doy gracias a Dios por estar con vida y ahorita me siento como niño con juguete nuevo, por volver a pisar la tribuna, haciendo lo que me gusta, apoyando al equipo de mis amores y sí estuvo muy horrible lo vivido, pero le doy gracias a Dios por dejarme seguir viviendo“, mencionó.
“Sobre todo mi familia, hijos, mis nietos, yo le decía ‘ Dios mío’. Yo gritaba dentro del hospital ‘si crees que es mi momento aquí estoy’, cerré mis ojos y me veía yo ya en el cajón, la verdad, porque estaba saturando 45 y estaba a 15 litros, lo último del oxígeno, ya me querían intubar y les dije que no me lastimaran y que si Dios lo quería así, pero los milagros existen, las oraciones y aquí estamos”, recordó.
De a poco, la Chiva Loca salió adelante y ahora tiene una vida casi normal; ya pudo recuperar el buen andar, dejó el bastón pues se quedó sin fuerzas por la enfermedad.
Ya de regreso en el apoyo a Chivas, ahora desde lejos, Juan José también habló de lo que sintió al ver las terribles escenas de violencia en el Estadio La Corregidora en Querétaro.
“Nunca se había visto esto tan horrible, la verdad, esto ya se salió de todo el entorno, muy feo, pero ojalá estemos a tiempo de poder erradicar todo esto y que no pase esto en los estadios, porque vienen niños, familias y que todo esté bien”, comentó.
Durante mucho tiempo, Juan José viajó a apoyar a Chivas con su atuendo, y recordó que en varios lugares recibió heridas.
“Sí, antes a lo mejor como yo decía, nos mentamos la madre los de enfrente con los de al lado y afuera, tú vas para el norte, yo para el sur, nos íbamos cada quién, pero híjole, con el paso del tiempo se ha puesto muy feo”, expresó.
“Yo tengo en el cuerpo navajazos y de todo, en aquellos tiempos yo siempre me caractericé por ser valiente y a la vez a lo mejor tonto, porque iba a todos los estadios y con la Chiva me quitaba la cabeza y estaba en la tribuna, arriesgaba mucho, porque en el Jalisco sacaba los monos, los pateaba, era show, parte del espectáculo, pero la gente lo tomaba muy en serio, ahora me la pienso y digo que me arriesgué mucho.