Encadenados y rapados, EU envía a El Salvador a 238 miembros del Tren de Aragua
Trump invocó la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 para el envío de miembros de la banda criminal venezolana

EXCELSIOR
El Salvador recibió este domingo a 238 presuntos miembros de la banda criminal venezolana Tren de Aragua enviados por Estados Unidos para ser recluidos en una prisión de máxima seguridad, luego de que el presidente Donald Trump invocara una antigua ley de guerra para expulsar migrantes.
Trump invocó la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, pero el sábado un juez federal suspendió temporalmente su orden, al parecer cuando los aviones ya se dirigían a El Salvador.
Hoy llegaron a nuestro país los primeros 238 miembros de la organización criminal venezolana Tren de Aragua. Fueron trasladados de inmediato al CECOT, el Centro de Reclusión para Terroristas, por un período de un año (renovable)”, informó el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, en la red social X.
Estados Unidos incluyó en febrero a este grupo criminal de origen venezolano en su lista de organizaciones terroristas, al igual que a la pandilla Mara Salvatrucha (MS-13), creada por salvadoreños y otros migrantes en ese país.
Trump emitió la orden para deportar a los presuntos miembros del Tren de Aragua al argumentar que tenía derecho a declararlos “enemigos extranjeros” bajo esa ley de hace más de dos siglos.
Bukele, en una reunión celebrada el mes pasado con el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, se había ofrecido a alojar en su país a presos procedentes de Estados Unidos, entre ellos miembros del Tren de Aragua y de la panadilla MS-13.

Encadenados y rapados
Los tres aviones con los presos aterrizaron en la madrugada en el aeropuerto salvadoreño.
En videos divulgados por el gobierno salvadoreño se ven militares en el aeropuerto bajando a los presos desde los aviones y subiéndolos encadenados a autobuses, que luego viajaron en caravanas hacia el Cecot.
A su llegada a la cárcel, fueron arrodillados mientras decían sus nombres a los agentes penitenciarios, quienes les raparon el cabello. El video mostró también como fueron ingresados a sus celdas vestidos con pantalón corto, camiseta y calcetines blancos.
El Cecot es la prisión de máxima seguridad que el gobierno de Bukele levantó para encerrar a detenidos en el marco de su “guerra” en contra las pandillas, lanzada hace casi tres años. Está ubicado en una zona rural de Tecoluca, a 75 km al sureste de San Salvador.
Considerada la prisión más grande de América Latina, fue inaugurada el 31 de enero de 2023. Esta diseñada para 40.000 presos, pero hasta ahora solo estaban recluidos unos 15,000 miembros de las pandillas Mara Salvatrucha (MS-13) y el Barrio 18.
Estados Unidos pagará una tarifa muy baja por ellos, pero una tarifa alta por nosotros”, agregó Bukele.

23 pandilleros salvadoreños
Rubio informó este domingo que además de los presos del Tren de Aragua, Estados Unidos envió de vuelta a El Salvador a 23 miembros de MS-13 para que enfrenten a la justicia.
Hemos enviado a dos peligrosos líderes de la MS-13, además de 21 de sus miembros más buscados, de regreso a El Salvador para que comparezcan ante la justicia”, escribió el jefe de la diplomacia estadounidense en la red X.
Además, tal como prometió Trump, “enviamos a más de 250 extranjeros enemigos del Tren de Aragua, a quienes El Salvador se comprometió a mantener en sus excelentes cárceles a un precio justo que también ahorrará dinero a nuestros contribuyentes”, agregó Rubio, con una cifra diferente sobre el número de detenidos expulsados pertenecientes a esa organización criminal.
El Tren de Aragua se conformó en 2014 en la cárcel venezolana de Tocorón, en el estado de Aragua (centro-norte). Está vinculado a asesinatos, secuestros, robos, venta de drogas, prostitución, extorsión y trata de personas.
Sus actividades se expandieron a varios países del continente, entre ellos Estados Unidos, y en Sudamérica a Colombia, Chile y Perú, según diversos informes de inteligencia.
Tres países centroamericanos –Guatemala, Panamá y Costa Rica– han aceptado servir de “puente” para migrantes deportados por Washington, pero El Salvador es el único que acepta presos.