Donald Trump desempolva Ley Antimigrante para desmantelar redes criminales en EU
El presidente electo dice que el recurso va contra las pandillas de migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, prometió durante su campaña que invocará la Ley Enemigos Extranjeros de 1798, para identificar y desmantelar a cada una de las redes criminales de migrantes que operen en suelo estadounidense.
De acuerdo con la cadena CNN, John Adams era presidente cuando el Congreso aprobó por primera vez la medida. Estados Unidos estaba compuesto por solo 16 estados. Y una guerra con Francia parecía inminente.
Trump ha afirmado que la ley le otorgará a su gobierno “una tremenda autoridad” y permitirá a los funcionarios “remover a todos los miembros de pandillas conocidos o sospechosos, traficantes de drogas o miembros de cárteles en Estados Unidos”.
Expertos legales dicen que los intentos de invocar la ley podrían enfrentar una batalla difícil en los tribunales. Pero dada su presencia en la plataforma del Partido Republicano, es probable que siga adelante.
Los afectados serán “todos los ciudadanos, residentes o súbditos de la nación o gobierno hostil” que tengan al menos 14 años y no se hayan naturalizado como ciudadanos estadounidenses “serán susceptibles de ser aprehendidos, restringidos, asegurados y removidos como enemigos extranjeros”.
En otras palabras, ciertas personas que no son ciudadanos estadounidenses podrían ser declaradas “enemigos extranjeros” basándose en su nacionalidad.
Las detenciones y deportaciones que ocurren bajo la Ley de Enemigos Extranjeros no pasan por el sistema de tribunales de inmigración, que ofrece a los migrantes la oportunidad de buscar alivio y presentar su caso para quedarse en el país.
Por otra parte, Trump reveló que la reunión que tuvo en la Casa Blanca con el mandatario saliente, el demócrata Joe Biden, para preparar la transición de poderes fue “muy agradable”.
En declaraciones a The New York Post, Trump explicó que gracias a ese encuentro ambos políticos pudieron “conocerse de nuevo” y dijo que su equipo de transición y el de Biden disfrutan de una “muy buena relación”.
El republicano reveló que incluyó Medio Oriente y la guerra en Ucrania en su plática con Biden. También dijo que la transición está yendo “muy bien” y que ambos planean reunirse nuevamente justo antes de la inauguración.