Cuantiosas las perdidas de flora y fauna, en Quiaviní y comunidades aledañas
8 días de duración el incendio. Protestas, bloqueos y retenciones.
JUAN H. CASTELLANOS.
A más de ocho días del incendio iniciado en inmediaciones de Cerro Quiavini perteneciente al municipio de San Lucas Quiavini, las perdidas en materia de flora y fauna silvestre resultan cuantiosas, en las comunidades San Felipe y San Pablo Güila y localidades cercanas, por ello habitantes de la última localidad decidieron iniciar una serie de bloqueos- seis el viernes 1 de marzo – sobre la carretera federal 190 a la altura del Crucero de San Dionisio Ocotepec, en protesta por la presunta falta de apoyos para sofocar el siniestro que se registraba en esa zona de los Valles Centrales de Oaxaca.
Por la mañana San Lucas Quiavini, lloro a sus cinco fallecidos a partir de las ocho de la mañana en el sepelio de las víctimas, que por la tarde en el exterior del palacio municipal, les realizaran un homenaje de cuerpo presente.
Todo en medio de la conflagración, que continuaba de manera intensa e incontrolable, abarcando más hectáreas de pueblos aledaños.
Las víctimas fueron identificadas como José Hernández, Felipe García, Pedro Curiel Diego, Celso Diego y Rafael Antonio.
En tanto el Gobierno de Oaxaca reportaba que ante la persistencia del incendio en San Lucas Quiaviní y San Pablo Güilá, se encontraban en combate 39 personas de la Comisión Estatal Forestal, 36 de la Comisión Nacional Forestal y 30 elementos de la Guardia Nacional y 50 personas comuneras, trabajan en actividades de brecheo y contrafuego.
Actividades que eran reforzadas por integrantes de la Fuerza de Reacción perteneciente a la 23 Compañía de Infantería no Encuadrada (Cine) en Huajuapan de León, jurisdiccionados a la 28 Zona Militar, quienes aplicaban el Plan DN-III-E.
Sin embargo los daños hasta el viernes 1 de marzo resultaban de más de 500 hectáreas de bosques consumidas por el fuego extendido, llegando a otras comunidades, por lo que las hectáreas de arbolado consumidos por el fuego fueron incrementadose.
Ante ello habitantes de Santiago Matatlan determinaron sonar las campanas, para convocar a la población para atender el incendio que inició en San Lucas Quiaviní, y que estaba próximo a llegar a ese municipio de los Valles Centrales.
Por otra parte varios bloqueos carreteros sobre los diferentes puntos, se intensificaron sobre la carretera federal 190, uno sobre el kilómetro 61 tramo carretero Totolapan – Santiago Matatlan a la altura del crucero de San Dionisio, uno más a la altura del fraccionamiento Rancho Valle del Lago, otro Tlacolula de Matamoros – Miltla a la altura de Unión Zapata.
Dos más sobre el distribuidor vial el Tule sobre tramo Tlacolula de matamoros – Oaxaca de Juárez a la altura de PEMEX, Colonia la Guadalupana a la altura de la zona arqueológica de Dainzu, bloqueos qué continuaban a las 10:25 del mismo viernes hasta 5:30 del sábado y seguían el domingo por las diferentes comunidades, afectadas por el incendio forestal.
Sábado en que pobladores de San Pablo Güila, retuvieron el forma indefinida a Donato Vargas, llamado “coordinador de delegados de paz”, y a otros 7 más, quienes serian liberados hasta que el gobierno del estado cumpliera con la ayuda para sofocar el incendio fuera de control.
A su vez el Gobierno de Oaxaca informaba que el helicóptero MI-17 de la secretaría de Marina había llegado el sábado realizando un sobrevuelo de reconocimiento sobre la zona del incendio, para valorar las áreas activas y localización de puntos estratégicos del siniestro, con el objetivo de definir un plan de ataque en conjunto con el equipo técnico.
Sin embargo admito que el domingo 3 de marzo a primera hora, inicio con su labor por la que fue convocada.