Profesores crean “botiquín de emociones” para acompañar a los alumnos taras REGRESO a clases

MILENIO

Los docentes armaron un “Botiquín de las Emociones” para acompañar a sus alumnos en este proceso de la pandemia y la adolescencia.

Con un emotivo mensaje y un pequeño “Botiquín de las Emociones”, que incluye un chocolate, un palillo, un curita y hasta una bolsa de té, los maestros y maestras de la Secundaria Oficial No.5 de Toluca dieron la bienvenida a sus alumnos, recordándoles lo importante que son.

Luego de 15 meses llenos de angustia, miedo y una serie de cambios inesperados en todos los ámbitos, los y las docentes de esta institución planearon cómo apoyar al alumnado para que en medio de esta incertidumbre pudieran dar el primer paso para regresar a las aulas.

Al ingresar al plantel y luego de todo un filtro sanitario, que incluye la toma de temperatura, el uso de gel antibacterial y su paso por un arco de desinfección, las y los alumnos asistentes recibieron una pequeña bolsita, que se convirtió en un “Botiquín Emocional”, con al menos ocho elementos importantes, cada uno con un significado especial, que les ayudará no sólo en esta etapa, sino que lo recordarán por siempre.

En esa pequeña bolsita de celofán, el personal educativo colocó con motivación un incentivo para sus alumnos, que en medio de esta crisis sanitaria no sólo han pasado por momentos de tristeza o incertidumbre, también se han enfrentado a la enfermedad e incluso han perdido a un ser querido.

En esta bolsita que contiene un lápiz de color, una goma de borrar, una goma de mascar, además de un chocolate, un palillo, un curita y hasta una bolsa de té, simbolizaron una serie de consejos a sus alumnos, quienes ya extrañaban a sus amigos, a su escuela y a sus maestros.

Cada uno de estos elementos, aseguró el profesor, José Juan Anaya Sandoval, tiene todo un significado, por ejemplo el palillo es para recordar que hay que escarbar en los demás y en uno mismo, todas las cualidades; la liga es para no olvidar ser flexibles, ya que las cosas y las personas no siempre son de la manera como uno quiere.

El curita, refirió el profesor, es para ayudar a curar aquellos sentimientos heridos; el lápiz de color es para que los alumnos y alumnas anoten diariamente todas sus bendiciones; la goma de borrar es para tener presente que todos cometemos errores, mientras que la goma de mascar recuerda que se deben adherir o pegar a todo lo bueno.

El chocolate y el té tienen un significado especial en medio de esta pandemia, ya que nos recuerda que todo el mundo necesita un beso o un abrazo, diariamente, y que siempre se debe tomar un tiempo para relajarse y hacer una lista de todo lo que se tiene.

El regreso a clases

Este regreso a clases presenciales fue inusual pues los alumnos y alumnas han tenido que enfrentar una serie de emociones en cascada, en una etapa como la adolescencia; que por sí misma representa una serie de retos y sumada una pandemia se vuelve mucha más compleja.

El profesor indicó que con este pequeño presente se estimuló a los estudiantes, para que pudieran expresar todo aquello que lleva más de un año guardado en su corazón y en sus pensamientos y la idea surgió del equipo de Orientación de este espacio académico, que además colocó carteles de bienvenida, acompañados con fotografías de los estudiantes, con el fin de motivarlos y acompañarlos en este proceso.

“Previo al regreso a clases hicimos varias reuniones, prácticamente 100 padres de familia decidieron regresar a clases y uno de los principales factores fue que los padres encontraron una especie de tristeza, síntomas como de apatía o de cansancio, consideraban que ya era conveniente que sus hijos ya empezaran a convivir con sus amigos, con sus compañeros, que era necesario trabajar la parte socio emocional, la parte afectiva, platicar”.

Así, en conjunto con los padres de familia, con la autoridades educativas y los docentes, se planeó el regreso a las aulas, cumpliendo con todas las medidas sanitarias.