De la gloria a la tragedia: Noé Hernández, el marchista mexicano que ganó plata en Sidney 2000
El marchista consiguió plata en Sídney 2000, pero a sus 34 años de edad falleció.
Hace 22 años, Noé Hernández llegó a la meta en el tercer sitio de la marcha 20 kilómetros en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000, sin embargo, por la descalificación de Bernardo Segura, quien llegó en el primer lugar, Hernández se quedó con la plata y fue una presea que él mismo sentía que no había ganado.
“No merezco la plata. Lo que gané fue el bronce. Es injusta la calificación de Bernardo Segura y hay una persecución en contra los marchistas de México”, dijo Hernández tras culminar la prueba con un tiempo de 1:19:03 horas.
Ya en unos momentos más tranquilo, Hernández señaló: “Dedico esta medalla a mi técnico y a mi familia, de la que estoy alejado desde hace un año. Todo lo que quiero es volver a estar con ellos”.
Después de esos Juegos Olímpicos, Noe logró la mejor marca de su carrera deportiva en el Campeonato Mundial de París 2003, y fue con un tiempo de 1:18:14 horas y quedándose con el cuarto sitio en la prueba de los 20 kilómetros.
En el 2006 se operó de una lesión en la rodilla, pero el marchista no pudo recuperarse al 100 por ciento y estuvo tres años fuera de las competencias. En marzo del 2009 intentó regresar y participó en el circuito de marcha de Chihuahua, evento celebrado en marzo, donde se quedó con el sitio 24, y después de ver que ya no tenía futuro en el alto rendimiento decidió retirarse.
Después de renunciar a su carrera deportiva, Hernández entró a la política y fue encargado del deporte del municipio de Chimalhuacán, y por parte del Partido Revolucionario Institucional.
La tragedia para Hernández llegó el 30 de diciembre del 2012. En ese día Noé recibió una bala en el cráneo tras un tiroteo en el bar llamado ‘La Reina de los Reyes’, ubicado en el Municipio de los Reyes La Paz, en el Estado de México.
Hernández fue traslado a la clínica de Neurotraumatología en Bosques de Aragón, donde tuvo diversas intervenciones quirúrgicas. Noé sobrevivió, pero perdió su globo ocular izquierdo y más del 70 por ciento de la vista en el derecho.
El estado de salud de Noé mejoraba con el tiempo, e incluso dio una conferencia de prensa a los medios de comunicación para hacerles saber de su evolución y se mostraba tranquilo, y a pesar de que ya solo veía sombras en el ojo derecho.
Sin embargo, el 16 de enero de 2013, a las 11:44 horas, Noé fue encontrado inconsciente en su casa, en el barrio de Xochiaca, en Chimalhuacán. El parte médico indicó que fue a causa de un paro cardio respiratorio. Finalmente, a las 12:15 horas se apagó la vida de un medallista olímpico y del último marchista mexicano varonil que logró una medalla en Juegos Olímpicos.
