Murió aplastado por enorme tronco de árbol de eucalipto
*La víctima circulaba sobre la carretera federal 190 cuando fue alcanzado por la extremidad del árbol de eucalipto
*cuatro personas se encuentran en calidad de detenidas por el deceso del hombre
Sergio CRUZ / Jairo MAINAN
Un ciclista empleado de la casa de la cultura del estado, murió tras caerle un pesado tronco de un árbol de eucalipto. Según versión de testigos presenciales, los hechos se suscitaron aproximadamente a las 16:00 horas de este miércoles, cuando Carlos Vásquez Pastrana de 35 años de edad, con domicilio en la unidad habitacional Ricardo Flores Magón de esta ciudad capital, se desplazaba sobre la carretera federal 190, en el carril que conduce del monumento Benito Juárez hacia el estadio de Béisbol, a bordo de una bicicleta de color azul.
Debido a que dicho sujeto en ese momento escuchaba música con sus audífonos, no se percató que sujetos con motosierras y hachas desramaban un gigantesco árbol de eucalipto, situado en un predio ubicado a horilla de carretera, casi frente a la Macroplaza, cuyos hombres pusieron sobre la carpeta asfáltica, a 15 metros de donde laboraban, sillas con trapos color rojo y conos pequeños de color naranja, como señalamiento.
Para mala suerte del ciclista, precisamente pasaba por el lugar cuando se desprendió un tronco de dicho árbol, el cual le cayó encima, lo que produjo un estallamiento de cráneo con exposición de masa encefálica y posteriormente la muerte instantánea.
Al lugar de los hechos arribaron paramédicos del cuerpo de Bomberos quienes trataron de auxiliar a la víctima, sin embargo ya se encontraba sin vida, ante ello procedieron a remover las enormes ramas que tenía encima.
Ante ello, elementos de diversas corporaciones policías que se presentaron a tomar conocimiento solicitaron la intervención del agente del Ministerio Público, el cual minutos después se presentó acompañado de peritos en diversas materias dependientes de la Procuraduría General de Justicia del estado (PGJE), quienes realizaron las diligencias correspondientes.
En tanto, el representante social ordenó el levantamiento del cadáver al anfiteatro capitalino para la práctica de la necropsia de ley.
Durante las diligencias, Agentes Estatales de Investigación detuvieron a Feliciano Pérez Agustín propietario del inmueble, así como a sus sobrinos Reynaldo Pérez Bautista, Jorge Pérez Bautista y Saturnino Pérez Ramírez, este último quien fue contratado por el propietario del predio para desramar el gigantesco árbol; todos ellos, fueron puestos a disposición del representante social que tomó conocimiento del deceso, como presuntos responsable del delito de homicidio culposo.
