Jorge Luis Borges y Roberto Arlt, juntos en Museo Nacional de Brasilia
Los universos literarios paralelos y opuestos que agitaron Buenos Aires entre 1920 y 1940 se cruzan desde hoy en Brasilia, en una muestra sobre los grupos Florida y Boedo, dos de las más representativas corrientes culturales argentinas.
La exposición “Vanguardias Literarias Argentinas 1920-1940”, que abrió al público hoy en el Museo Nacional de Brasilia, propone un recorrido por ese rico período creativo a través de fotografías, grabados y material de revistas y diarios de la época.
Los grupos Florida y Boedo representaron los dos polos de las corrientes literarias de la Argentina de entonces y encarnaban dos visiones opuestas del mundo, representadas por escritores de la talla de Jorge Luis Borges y Roberto Arlt.
“Fueron grupos pioneros. Florida representaba una vanguardia más elitista, mientras que Boedo tenía una visión más revolucionaria del mundo y más comprometida con el proletariado”, dijo el embajador argentino en Brasil, Luis María Kreckler, al inaugurar la muestra.
Entre los miembros del grupo Florida sobresalían Borges y su hermana Norah, Conrado Nalé Roxlo, Leopoldo Marechal y Ricardo Güiraldes, entre muchos otros, todos influidos por el surrealismo, el dadaísmo y otras corrientes en boga en la Europa de entonces.
El grupo Boedo, con fuertes raíces obreras y marcada ideología socialista, buscaba inspiración en los suburbios proletarios y tenía entre sus principales integrantes a Roberto Arlt, Raúl González Tuñón y Nicolás Olivari, entre otros.
En la muestra inaugurada hoy en Brasilia se exponen primeras ediciones de libros de los miembros de las dos corrientes, como “Don Segundo Sombra” (1926), de Güiraldes; “Laberinto de Amor” (1936), de Marechal, y “45 días y 30 marineros” (1933), de Norah Lange, por el grupo Florida.
De los miembros de Boedo están en exposición las primeras ediciones de “El juguete rabioso” (1926), “Los siete locos” (1929), “Los lanzallamas” (1931), todos de Arlt, “La muerte en Madrid” (1939), de González Tuñón; y “El hombre de la baraja y la puñalada” (1933), de Nicolás Olivari.
Junto con fotografías de época, se mezclan portadas de revistas como “Sur”, fundada por Victoria Ocampo, del grupo Florida, y “Los Pensadores” y “Dínamo”, que publicaban los miembros de Boedo.
La exposición, que estará abierta al público hasta el próximo 19 de mayo, también presenta algunas películas argentinas de la época, como “La ñata gaucha”, con Tita Merello y Azucena Maizani, así como una acuarela de Norah Borges en la que recrea el mapa de Brasil.