Carlos Bracho fomenta la lectura en planteles del COBAO

CARLOS BRACHO 4Haciendo gala de sus habilidades histriónicas, el actor Carlos Bracho interpretó a uno de los personajes más universales de la literatura, Don Quijote de la Mancha a su fiel acompañante, Sancho Panza y a su eterna enamorada, doña Dulcinea del Toboso, en el marco del programa “Leo y Luego Existo” que se realizó en los  planteles 34 San Antonino Castillo Velasco y 61 San Bartolo Coyotepec, del COBAO.

En presencia del director general del Colegio de Bachilleres, Germán Espinosa Santibáñez, del Coordinador General de Educación Media y Superior Ciencia y Tecnología, Fausto Díaz Montes de los directores de los planteles, autoridades municipales y del gerente de la Fundación COBAO, Raúl Vásquez Dávila, Carlos Bracho, leyó e interpretó a Don Quijote en el pasaje literario donde le envía una carta de amor a Doña Dulcinea, una  campesina, que según el caballero andante era una emperatriz y  bella dama de un reino de la Mancha.

Antes, Espinosa Santibáñez destacó la importancia de la lectura, es un hábito que no sólo acrecenta la cultura personal, sino también forma parte de la personalidad de cada persona, explora otros mundos a través de la imaginación y la recreación de los personajes o pasajes contenidos en cada una de las obras que los escritores hacen.

Por su parte, Díaz Montes señaló que la lectura es la herramienta de toda la vida, como estudiante o como profesionista, la lectura de un libro lo puede llevar a ser un mejor ciudadano, ampliar el vocabulario y las relaciones personales.

Con la picardía y la jocosidad con la que está escrita la obra, Carlos Bracho imitando el supuesto lenguaje español de la época, manda a su fiel escudero Sancho Panza con su carta de amor para Dulcinea,  a su regreso le pide detalles de la actitud de su eterno amor con relación a la misiva que le envió, su fiel escudero relata los pormenores de la campesina y lo que hace con la carta que al final no  sabe ni leer ni escribir.

Más adelante, narra como Don Quijote anuncia a su escudero la lucha desigual que sostendrá contra unos gigantes de largos brazos que están dispersos en el campo, Sancho más lúcido que su amo, le dice que no son gigantes sino molinos de vientos que sirve para moler y esos brazos largos no son otra cosa que las aspas que mueven las piedras de la moliendas.

Luego de concluir su lectura, Bracho invitó a algunos estudiantes a leer algunos fragmentos de sus obras literarias que después fueron comentadas por el actor.

Al final, se hizo entrega de  libros de diversos autores otorgados por la Fundación COBAO para acrecentar el acervo bibliográfico de la biblioteca de cada plantel, asimismo de computadoras donadas por el mismo organismo.

Al evento también fueron invitados alumnos de las escuelas secundarias de la localidad.

 

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