Proponen castigar a funcionarios negligentes ante feminicidios

Irinea Buendía, madre de Mariana Lima, víctima de feminicidio en 2010, en Chimalhuacán, Estado de México, llegó a la capital de la Oaxaca con su propuesta de una nueva ley para castigar servidores públicos, omisos ante feminicidios.

La activista que lidera la Caravana Nacional para dar a conocer la sentencia que lleva el nombre de su hija se reunió con las víctimas indirectas de feminicidio en la ciudad y zona metropolitana de Oaxaca, a quienes les compartió el alcance de una eventual ley que lleve el nombre de su hija, que incluiría un nuevo delito cometido por servidores públicos: Negación de la Justicia por Razones de Género.

Reveló las deficiencias en el sistema de justicia en la investigación de violencia contra las mujeres, y resaltó que su empeño sentó las bases para abordar las muertes violentas de mujeres, lo que generó el primer pronunciamiento de la Suprema Corte en caso de feminicidio.

Esto, dijo, “estableció la importancia de realizar investigaciones con enfoque de género, resaltar la capacidad del sistema de Justicia para reparar el daño y promover un cambio cultural”.

Conviene mencionar que, desde finales del año pasado, Buendía junto con Lidia Florencio Guerrero, también madre de víctima de feminicidio, emprendieron esta caravana, visitando las entidades del país y sus fiscalías, “con el objetivo de promover un protocolo que sirva de parámetro a nivel nacional para juzgar con perspectiva de género todas las muertes violentas de mujeres”.

También la acompañaron el papá de Cecilia, asesinada en Tlaxcala; la madre de María Fernanda a quien le arrebataron la vida en el Estado de México, así como de la mamá de Ivón, asesinada en Oaxaca.

En el jardín Constitución, de frente al Palacio de Gobierno, en el zócalo, instalaron pequeñas cruces de madera rotuladas con la palabra “Feminicidio”.