Sueño cumplido; el ambicioso anhelo de un joven del rebaño

Excelsior

Eduardo Javier López asegura que desde que inició su carrera en Chivas añoró una goleada sobre el América, como la del sábado.

CIUDAD DE MÉXICO..-Pasado el Clásico, queda la impresión de que el pueblo mexicano es Chivas, porque Chivas es futbol. La brillante demostración y demoledora a la vez ante el América, arrulló a la mayoría de la gente que despertó con una sonrisa el domingo.

Hay cosas que dividen al Guadalajara del América: la región, la idiosincrasia y un balón, y las Chivas en su más sensato punto de expresión, revalorizaron su cantera con jugadores en los que se puso inversión e ilusión.

Eduardo Javier López, La Chofis, usa una gorra ladeada al estilo reggaetonero. Es un niño al que apenas el acné le ha desaparecido del rostro dejando leves secuelas y carga al número 10 del equipo más popular de México. En muchos sentidos va madurando, pero en lo futbolístico, parece que ya está hecho.

“Siempre soñé con un marcador así ante el América, era una de las ilusiones que tenía cuando inicié. Además, arropados por tanto aficionado, a uno se le pone la piel de gallina”, dice el jugador.

Sabe La Chofis que ser de Chivas implica mucha responsabilidad, “es distinto a defender la playera del América, son otras sensaciones”, porque sobreentiende que el equipo rojiblanco tiene un poder de atracción sin igual.

“Son esos partidos donde uno se hace grande. Traté de jugarlo sin presión. Matías Almeyda (el técnico) había trabajado mucho esto con nosotros y no nos salían las cosas hasta ahora. Al principio no dejas de sentir nervios, pero conforme avanzó el partido me sentí mejor y de pronto me di cuenta que lo que habíamos ensayado varías veces, nos salía casi de forma natural”, explicó el juvenil de las Chivas.

Por un momento en su corta vida (21 años), Eduardo Javier sintió que trabajaba a contrarreloj porque las oportunidades de ser titular no se le presentaban.

“Llegó un momento con el Chepo de la Torre que me desesperé, aunque sabía que mi oportunidad llegaría. Nunca creí que sería con Almeyda. Ahora, ya me siento feliz en un Clásico y con toda la idea de seguir adelante”.

El próximo líder de la zaga central

La partida de Carlos Salcedo a Italia abrió el hueco en la defensa central para el juvenil Hedgardo Marín, de 23 años. Tras el Clásico Nacional parece que cualquier crisis se ha superado en Chivas, y eso incluye el trabajo defensivo.

“Me dijo (Matías) Almeyda que sería titular luego del partido de Copa y me sentí muy agradecido porque es un hombre que da oportunidad a la cantera, ahora nos resta demostrarle que podemos responderle”, aseveró.

Marín no se sintió intimidado por cubrir la zona central de su equipo ante opositores como Silvio Romero y Darwin Quintero: “Me tocó secarlos, vigilar que no hicieran nada, creo que hice un buen partido”.

Ahora, está llamado a ser el líder de la defensa conforme pasen los años y asentarse de la mejor forma para sacar adelante el proyecto del Guadalajara.

“De entrada, el 3-0 no se me va a olvidar nunca. Se fue Salcedo, pero el proyecto continúa. Es mi amigo y me deja su espacio y enseñanzas”.