Santa María Chimalapa, también forman parte de las localidades que fueron defraudadas por empresas fantasmas

Paloma Duarte

Las congregaciones comunales de La Libertad, Río Frío y Nuevo San Juan, pertenecientes al municipio de Santa María Chimalapa, también forman parte de las localidades que fueron defraudadas por empresas fantasmas durante el sexenio de Gabino Cué Monteagudo.
En 2015, los representantes de esas comunidades buscaron a través de la gestión del gobierno liberar recursos para tres obras de infraestructuras que consideraban primordial para el desarrollo de su población.
Las obras finalmente fueron aprobadas por el Comité Estatal de Planeación para el Desarrollo de Oaxaca (COPLADE), en ese entonces encabezado por Gerardo Albino González y a través de la Secretaría de Finanzas, que dirigía Enrique Arnuad Viñas.
Estas obras que consistieron en un camino de acceso de 14 kilómetros a la congregación comunal la Libertad y dos sistemas de agua potable para Río Frío y Nuevo San Juan, sumaban un monto aproximado de cinco millones de pesos.
Sin embargo, las obras nunca fueron culminadas, y de ello estaba enterado el entonces presidente municipal de Santa María Chimalapas a la que pertenecen las tres comunidades, Sliaín Hernández González.
Los habitantes indicaron que acudieron a las instalaciones de la empresa contratada para la realización de las obras denominada “Vías terrestres y proyectos de ingeniería CANNAN”, donde se percataron que habían sido víctimas de fraude.
Lo anterior, porque la dirección que daba la empresa en Riberas del Río Atoyac número 318, nunca ha sido una oficina, más bien son canchas que pertenecen a la colonia Educación del municipio de Oaxaca de Juárez, y que son utilizadas para recreación deportiva.
La empresa se identificó con un registro fechado como del 16 de diciembre del 2010, y supuestamente se encargaba de hacer construcciones de ingeniería civil, aun cuando solo reportaba seis empleados en su nómina.
“El presidente los contrató sin consultarnos como comunidad, y las obras fueron abandonadas en un 40 por ciento por esta empresa, y si cobraron el completo de las obras”, dijeron.
Por ello ahora, las congregaciones afectadas exigen del gobierno estatal, se investigue el destino de los fondos aprobados y liberados para dichas obras, y se castigue con prisión a quienes fueron los autores del fraude.
Pero además solicitaron que se concluyan las obras pues son en beneficio de la población y bienestar de las familias que lo necesita y que requiere la atención en los caminos que no se culminaron.