Evitar embarazo en adolescentes para no arriesgar su vida reto del IMSS en Oaxaca

COMUNICADO

  • Termina con éxito Curso- Taller de Prevención de Violencia Obstétrica organizado por el IMSS

El embarazo en la adolescencia, es uno de los mayores retos que tiene el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Oaxaca para evitar que menores de edad pongan en riesgo su vida, principalmente en las zonas más apartadas de la orografía oaxaqueña y donde existen problemas que afectan seriamente a las jovencitas y mujeres como cáncer cervicouterino, menopausia, muerte materna, pro lapso del útero, aborto, que puede tener consecuencias tales como anemia, infecciones del aparato reproductivo e incontinencia urinaria.

Lo anterior se analizó durante el Curso- Taller de Prevención de Violencia Obstétrica, que realizó la Delegación del Instituto Mexicano del Seguro Social, a través de su esquema de Prospera, durante dos días y donde se analizaron temas como La Mirada de la Pertinencia Cultural en los Profesionales de la Salud, a cargo del ponente Enrique Rivera Barrón, del Programa IMSS- Prospera.

Se dijo que otras de las causas de mayor prevalencia en las mujeres es la anemia ferropenica vinculada a la pérdida de hierro en las mujeres durante la menstruación, él embarazo y la lactancia y exacerbada por prácticas culturales que privilegian a los hombres en la distribución de alimentos ricos en hierro en el hogar.

Esto, aunado a la osteoporosis que es ocho veces más probable en las mujeres que en los hombres; asociada no sólo factores biológicos sino también a la forma de vida y hábitos alimenticios que desencadenan en diabetes, hipertensión y obesidad: trastornos que son más frecuentes en las mujeres que en los hombres y también en grupos de menores ingresos.

Durante el desarrollo del curso, efectuado en un local al norte de la ciudad capital y donde participaron directores de los nueve hospitales, jefas de enfermeras, supervisores médicos y trabajadores sociales, el ponente Rivera Barrón, comentó que en la presentación de un servicio de salud es muy importante la cultura; una atención con pertinencia cultural identifica las necesidades de las mujeres en el trabajo de parto, el parto y el puerperio.

Estas necesidades, dijo, están permeadas por la cultura, es decir, por las creencias sobre lo que las mujeres y sus familias consideran ser atendidas con buenas prácticas. Tomar en cuenta sus costumbres y sus creencias pone a las mujeres en condiciones de confort y seguridad.

Explicó que un alto nivel de experiencia profesional de acuerdo a la población a la que se atiende (otra cultura) debería influir en que la Unidad Médica cuente con diversas formas de atención de parto, considerando las prácticas locales. Las mujeres deben conocer sus posibilidades de tomar decisiones sobre la forma de atención que prefieren, con quien atenderse, donde hacerlo, con el apoyo de quienes, y en qué posición parir.

Asimismo, se dijo que se tiene la idea que las enfermedades cardiovasculares afectan generalmente en el hombre; en consecuencia, no se reconocen los síntomas en las mujeres. Los datos indican que las enfermedades cardiovasculares son una de las causas de la defunción de las mujeres mayores de 49 años.

Los servicios de planificación familiar se concentran en las mujeres y excluyen a los hombres, lo cual limita el acceso de los hombres a estos servicios. Además, en vista de las relaciones de género en la familia, las decisiones relativas a los anticonceptivos deben incluir a los hombres, de lo contrario, el compañero o el esposo podría impedir que la mujer use anticonceptivos.

Por su parte, el maestro Antonio Heras Gómez, de IMSS Prospera, sostuvo que los pacientes son el mayor recurso sin explotar en la asistencia sanitaria. Reconocer y fortalecer el rol del paciente, con pacientes bien informados, con lo tomemos decisiones compartidas, puede ser la mejor esperanza que exista para asegurar que la atención a la salud siga siendo efectiva y sostenible en el futuro.

Tanto directores como enfermeras y supervisores médicos, que recibieron el curso, refrendaron el compromiso de que todo lo aprendido lo aplicarán en sus zonas para evitar que las mujeres se embaracen a temprana edad, hacer uso de las redes de salud y de parteras rurales para evitar muerte materna, además de inculcarles  hábitos saludables a las personas para evitar enfermedades y tengan una mayor esperanza de vida.

Antes de la clausura de los trabajos se realizó la entrega de reconocimientos a todos los participantes.

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