Día de la Libertad de Expresión

reporterosPor Horacio Corro Espinosa

Hoy, 7 de junio, se celebra el día de la “Libertad de Expresión”. Esta celebración sólo se lleva a cabo en nuestro país, México. Por este motivo, a todos los nuevos y viejos periodistas de la entidad oaxaqueña, muchas felicidades.

A lo largo de mi vida, siempre me han sucedido hechos importantes en los días que tienen que ver con el periodismo. Un 7 de junio, no recuerdo exactamente el año, pero un grupo de periodistas de Huajuapan, solicitamos a las Autoridades Municipales que la plaza más importante de la ciudad llevara el título de “Libertad de Expresión” y es así como hoy se le conoce. Supongo que ese nombre durará hasta el día que llegue al poder un don chipocles de las importancias y le coloque su propio nombre.

Ayer, precisamente, unos jóvenes estudiantes de periodismo, me hacían varias preguntas acerca de esta profesión. Les platiqué que hace años, el trabajo periodístico era lento, no como hoy, que por la gran variedad de medios que tenemos a nuestro alcance, se nos exige rapidez, agilidad, soltura y puntualidad.

Antes, lo más veloz que teníamos era el teléfono, le seguía el fax y al último el Internet. Este último era lentísimo. Todo esto nos hacía un tanto perezosos. Comenzábamos a escribir por la tarde, casi al cierre de las ediciones. Sin embargo, en estos días que por suerte nos ha tocado vivir, los medios de comunicación se han destacado sobre todos los demás inventos. Esto no quiere decir que todos los compañeros periodistas sean ágiles para escribir, pero al reportero de hoy se le exige redactar y escribir rápido.

Los jóvenes con los que yo platicaba parecían sorprendidos de que yo diera tanta importancia a la velocidad, como si se tratara de un corredor de cien me­tros planos en vez de un periodista.

Después de la plática, uno de los jóvenes me preguntó que si por hacer todo tan rápido no se pierde estilo, exactitud y perfección. Yo le dije que la mayor parte de los reporteros que escriben lentamente no ganan en perfección, sino que pierden el tiempo.

Las redes sociales, por ejemplo, son un sitio donde la información puede durar segundos y luego desaparecer porque puede llegar otra de mayor importancia. Es por eso que se exige la rapidez.

Supongo que los chavos quedaron muy asombrados de que hoy, a pesar de las nuevas tecnologías la velocidad fuera cosa importante. Uno de ellos me dijo: no me convences, porque a mí me gusta pensar despacio.

Y como les decía, siempre me sucede algo importante en esta fecha que tiene que ver con el periodismo, por ejemplo, que hoy, lectores de este medio, me hayan prestaron su atención.

Una vez más, a todos los periodistas lentos o veloces que toda la entidad oaxaqueña, felicidades.

 

Twitter:@horaciocorro
horaciocorro@yahoo.com.mx

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