Defiende su lugar, nada la detiene

CIUDAD DE MÉXICO.

Los golpes que la vida le propinó a Yamileth Mercado no la tumbaron. Tampoco lo hizo aquel grandulón, quien, con 10 kilos de más, la mandó al hospital previo al debut de la chihahuense en los cuadriláteros. La actual campeona mundial súper gallo del CMB planea ahora uno de sus mejores combates: dignificar al boxeo femenil.

Yeimi Mercado ha librado fuertes batallas en los meses de pandemia y en cada una ha salido con los brazos en alto, incluso al vencer al covid-19.

Tenía muchos síntomas, me recetaron medicamentos y estuve en reposo. Previo a mi pelea me hicieron la prueba por covid-19 y me salió que sí había tenido covid. No tuve secuelas, aunque los primeros días que regresé a entrenar me dolía mucho el pecho, me mareaba y vomitaba, pero se me quitó rápido. Seguí con el acondicionamiento físico y ya no tuve secuelas mayores”, expresó sobre el virus que la atacó en octubre pasado.

Además de la enfermedad, sufrió fractura de nariz por un cabezazo durante la pelea de preparación que sostuvo en septiembre.

Hace exactamente un mes realizó la primera defensa del título ante Alejandra La Rockera Guzmán y aunque se le reventó el tímpano del oído izquierdo, debido a un golpe, pudo terminar la pelea y defender con éxito su cinturón

Desde el quinto round comentaba en mi esquina que me sentía muy extraña… aturdida; no me podía parar bien y me estaba tambaleando. Nunca se quitó el malestar, sumándole que se me vino la hemorragia por la nariz y creí que se haba refracturado por lo de la contienda anterior, pero era la misma hemorragia del odio y todo eso me desconcentró un poquito.

Nos tocó el beneficio de tener una buena preparación física para terminar la pelea, muchos hubieran decidido abandonar por esa condición, pero cambiando el estilo logré terminar y conseguir la victoria”.

Una lesión no iba a ser impedimento. Mis últimas dos peleas han sido así, con lesiones considerables y he terminado, eso habla de que difícilmente alguien me va a tumbar y voy a dejar que me quiten de mi lugar”.

La peleadora de 22 años, originaria de Ciudad Cuauhtémoc, Chihuahua, de donde asegura se dan las mejores manzanas del mundo, saborea ahora las mieles del triunfo, en una carrera que no ha resultado fácil ya que apenas en 2017 había decidido retirarse del boxeo profesional.

Ya no quería boxear, me aparté durante ocho meses de todo. Ya no quería regresar a este ambiente bastante duro para cualquier persona. Yo era una niña, tenía 18-19 años y ya no quería, no me parecían justas algunas cosas y quería retirarme. Pero me sentía triste todo el día, estaba deprimida. Entonces mi familia fue la que encaminó a regresar. Me convencí que mi motivación estaba en el boxeo. Yo estaba hecha para esto y nací para esto. Afortunadamente, regresé con las personas correctas y con el equipo correcto, que me supo levantar.”

Los buenos resultados abrieron las puertas a las grandes peleas.

Me costó mucho llegar hasta donde estoy. No tenía un respaldo de una televisora, la oportunidad me la gané a pulso, creo que eso es lo que me da el hambre para pelear. Quiero ser campeona por mucho tiempo y subí a demostrarlo.”

 

 

 

EXPERIENCIA EN ÁFRICA

La primera oportunidad le llegó en Kenya para enfrentar a la ídolo local y entonces monarca Fatuma Zarika, un combate que recuerda con un cariño especial y al que considera uno de los mejores de su carrera.

Dimos una gran demostración a pesar de que el escenario era tan imponente y tan grande. Recuerdo que había un rapero en vivo, impresionante el escenario y la gente tenía una coreografía entrenada. En las calles, había sillas afuera de los edificios porque estaban transmitiendo la pelea. Fue un evento impresionante, que pocas veces se ve en una pelea femenil.

Era complicado, sabíamos que si no noqueábamos no íbamos a ganar, fue una pelea electrizante y emotiva, la considero una de mis mejores peleas. A partir de ahí me voltearon a ver porque sólo era una joven chihuahuense de 20 años que nadie conocía hasta que los reflectores voltearon hacía mí y comienza el salto de mi carrera boxística”.

A pesar de la derrota por decisión dividida, la buena demostración en tierras africanas le sirvió para que más delante obtuviera la revancha en México y ante su gente de Ciudad Cuauhtémoc.

 

 

La boxeadora de 22 años entrena en un equipo de hombres.

Viví la gloria de coronarnos campeones del mundo en Chihuahua y poderlo compartir con familia y amigos. Dicen que nadie es profeta en su tierra, yo tuve la dicha de serlo.

Tuvieron que cerrar las puertas porque no podía entrar más gente. Había filas hasta la orilla de la calle, muy impresionante a pesar de no ser una plaza boxística”.

Su aventura en el boxeo la inició en un curso de verano y fueron los niños los primeros en probar sus puños. Desde entonces su preparación siempre la hecho en equipo de hombres

Yo sigo haciendo sparring con puros hombres, para mi última pelea no tuve sparring mujer. Fue Juan Francisco El Gallo Estrada uno de mis sparrings.

Cuando me inicié en el boxeo me pegaban los niños y me daba coraje. Ya después yo les pegaba y entonces dejaban de ir a los gimnasios por la vergüenza que les había pegado una niña.

Luego mi papá me dice ‘¿te acuerdas cuando les pegabas a los niños y los retirabas?’ muchos comparten en redes sociales que les pegaba y caen en cuenta que yo estaba en lo mío. Ahora en lugar de esconder que les pegaba una niña presumen que los golpeaba una campeona del mundo”.

 

SIN BAJAR LA GUARDIA

A lo largo de su carrera ha escuchado comentarios de que el boxeo no es para mujeres, pero ella pelea para que pronto todo cambie.

Todo mundo dice que el boxeo es de hombres.

Viene el despegue del boxeo femenil y empezarán a llegar las grandes carteleras. Buscamos la dignificación del boxeo femenil y que reciba el valor que merece. Entrenamos igual que los hombres, pelamos igual que los hombres y merecemos bolsas similares. Esperemos que pronto den resultados todos esos sacrificios que hacemos, así es como va a comenzar este cambio, esperemos que logren voltear los reflectores al llamado que estamos haciendo las peleadoras”.

De hecho, había planes de que su pelea de hace un mes pudiera realizarse en este fin de semana, pero los tiempos de su preparación no lo permitieron.

 

 

 

En todos los aspectos la mujer se ha ido empoderando día a día, no sólo en el boxeo. El Consejo Mundial de Boxeo está proponiendo diferente eventos, le están dando el valor a mujer y para nosotras es muy motivante”.

A la par de su preparación deportiva también cursó durante tres años la carrera de enfermería, pero debido a que tuvo que cambiar la sede de entrenamiento a Hermosillo la dejó inconclusa.

Quise revalidar mis estudios, pero era casi empezar de nuevo la carrera y no me convenía porque ya sólo me faltaba un año para terminar. Ahorita estoy viendo opciones para continuar, sino pensar en cambiar de carrera. Quiero retomar mis estudios, hay tiempo. El boxeo es temporal ahorita es mi mejor momento, pero no es para siempre”.

La chihuahuense es una peleadora que se pone sus moños en el ring y asegura que es parte de su personalidad.

Es algo emblemático para mí. Las únicas dos peleas que tengo perdidas no he usado moño, entonces para mí es básico. Veo que ya hay boxeadoras que lo usan”.

 

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